El técnico de Pérez Zeledón, Horacio Esquivel, no ocultó su descontento tras la expulsión de su defensor William Fernández en el partido contra Herediano. La decisión del árbitro Keylor Herrera, quien revisó una acción en la que supuestamente Fernández golpeó a Getsel Montes, generó controversia y, en opinión de Esquivel, influyó directamente en el desenlace del encuentro.
“¿De lo primero (la expulsión de Fernández)? Mejor pregúntele a Keylor (Herrera),” comentó Esquivel, visiblemente molesto. “Jafet le mete presión a todo el mundo, él les mete presión a todos acá; dichoso él que tiene esa autoridad para mover todo. A nosotros nos afectó mucho la expulsión”, afirmó el estratega generaleño, señalando que el liderazgo de Jafet Soto parece influir en el ambiente de la liga y en el arbitraje.
El técnico incluso añadió que la expulsión justo antes del descanso rompió el ritmo del juego para su equipo y cuestionó el tiempo añadido tras la decisión arbitral. “Me quedé asombrado,” comentó Esquivel. “Al final del primer tiempo cae la expulsión y luego da más tiempo. Nosotros estábamos manejando los hilos del partido. Si pita la jugada, Herediano no nos hace el gol”.
Esquivel explicó que intentó dialogar con el árbitro sobre la decisión, pero, aunque Keylor Herrera le explicó que había revisado la jugada en el VAR y consideró la expulsión como válida, Esquivel expresó que no compartía el criterio. “Él analizó una cosa en el VAR, pero yo vi otra distinta. Al final, ellos son la autoridad y hay que respetarlos”.
Pérez Zeledón se resiente con un jugador menos
Con respecto al partido, Esquivel admitió que Pérez Zeledón perdió fuerza tras la expulsión de Fernández. “Nos caímos en el momento en que quedamos con un hombre menos. Intentamos jugar a la contra, pero no pudimos; Heredia tiene una buena planilla con respecto a lo que nosotros queríamos hacer”, concluyó.
Para el técnico generaleño, la expulsión de Fernández fue un momento decisivo que condicionó el desempeño de su equipo, en un partido que, hasta entonces, consideraba equilibrado. La situación dejó en evidencia, según Esquivel, la diferencia en la influencia que algunos técnicos, como Jafet Soto, pueden ejercer sobre el ambiente de la liga y las decisiones arbitrales.