Guardiola llega al corazón del equipo y refuerza su rol de líder

GuardiolaANÁLISIS

Por Isaac Lluch (dpa)

Múnich, 22 abr (dpa) – La exhibición ante el Porto no sólo metió de nuevo al Bayern Múnich en las semifinales de la Liga de Campeones de fútbol, sino que reforzó al técnico español Josep Guardiola en su rol de líder absoluto del vestuario en un momento clave de la temporada.

“Noto que mis jugadores me siguen”, había dicho Guardiola en las últimas semanas, en las que afrontó “la fase más difícil” desde que entrena al Bayern.

La percepción del técnico quedó probada el miércoles en el Allianz Arena, donde el equipo dio al español una de sus mejores victorias como entrenador del Bayern, un 6-1 ante el Porto que remontaba la derrota por 3-1 de la ida.

Apenas con 14 jugadores disponibles y bajas importantes como la de los defensas David Alaba y Mehdi Benatia, los centrocampistas Bastian Schweinsteiger y Javi Martínez, y las estrellas Franck Ribéry y Arjen Robben, el equipo alemán tuvo que afrontar seis partidos en 18 días.

Guardiola ha llegado al alma del equipo cuidando todos los detalles, rehuyendo el papel de víctima y mezclando la exhortación a la épica con la recomendación de seguir su manual de fútbol de pase.

“La única manera de remontar ante el Porto es jugar bien. Solo con las partes nobles del ser humano no lo conseguiremos”, avisó el técnico antes del enfrentamiento contra el conjunto portugués.

Diez días antes, sin embargo, Guardiola había advertido que, a falta de poder plantear tácticas ideales por el peso de las bajas, su equipo debía responder con una fuerte mentalidad y coraje: “Nuestro juego ahora no es bueno. No podemos hacer jugadas provocadoras, no tenemos apenas uno contra uno. Pero los jugadores tienen un gran corazón y lucharán con pasión”.

Nada más concluir la exhibición contra el Porto -con un histórico 5-0 al descanso-, Guardiola eligió otro mensaje motivador al elogiar de nuevo a sus jugadores por encima de las tácticas. El técnico del Bayern se inventó la ubicación de Philipp Lahm como extremo derecho y disciplinó a Mario Götze en el costado izquierdo para percutir en las debilidades del Porto, que jugaba sin sus dos laterales titulares.

“Pero la gran diferencia a este nivel no es la táctica sino la mentalidad, el optimismo de los jugadores. Tras ganar el sábado pasado en Hoffenheim (2-0) y ya al día siguiente de perder en Oporto, escuché a mis jugadores que decían que íbamos a conseguir remontar”, dijo Guardiola, que, precisamente en el vestuario visitante de la cancha del Hoffenheim, dio un discurso para transmitir el orgullo que sentía por sus jugadores.

“Pep es incluso mejor psicólogo que táctico”, advirtió Thiago Alcántara en una cita que queda reflejada en el libro “Herr Pep” del periodista español Martí Perarnau.

“Tenemos muy buen ambiente y mucha confianza en el vestuario”, confirmó, tras el partido ante el Porto, el mediocampista español. “Se respira alegría. A pesar de las bajas y a pesar de todo, estamos primeros en la Liga bien distanciados del segundo, en semifinales de Copa y de Liga de Campeones”, precisó uno de los mejores jugadores de la noche.

Guardiola aplaudió a Thiago, de nuevo en el equipo tras una larga lesión, como un aficionado más cuando ordenó su sustitución en el minuto 90. El técnico le abrazó con mucha complicidad y luego elogió la “personalidad valiente” que tiene el centrocampista y que ha contagiado a la plantilla.

Tampoco parece casualidad que el entrenador eligiera a Dante para sustituir simbólicamente a Thiago. El central brasileño, uno de los más criticados durante la temporada, ha estado siempre a cobijo de Guardiola: “Me gustaría tener mil Dantes”.

Con detalles así el entrenador del Bayern se ha ido ganando a su grupo en un momento delicado y ha enterrado la crisis institucional que provocó la dimisión del equipo médico del club. Tras clasificarse por penales en Leverkusen para la semifinal de la Copa alemana, Guardiola también aprobó realizar un asado para toda la plantilla en una de las terrazas de la ciudad deportiva del club.

En su etapa en el Barcelona, el técnico español recurrió a impulsos psicológicos fuertes en momentos clave. Antes de la final ganada de la Liga de Campeones de 2009 en Roma, Guardiola hizo ver un vídeo basado en el film “Gladiator” a sus futbolistas. Ese mismo año, en la previa de la final victoriosa del Mundial de Clubes ante Estudiantes, el técnico cedió la palabra al argentino Gabi Milito y acabó zanjando con la consigna: “Para mí ya sois los mejores, pero si ganáis, seréis eternos”. Célebre también fue cómo en 2011, Guardiola concentró sobre sí toda la presión en la ida de las semifinales europeas ante el Real Madrid calificando a José Mourinho de “puto amo” de la sala de prensa.

Ahora Guardiola tiene cohesionado al equipo justo en el momento preciso. El Bayern puede proclamarse campeón de la Bundesliga este fin de semana, el martes que viene puede acceder a la final de la Copa alemana y espera rival de semifinales de la Liga de Campeones en el sorteo del viernes.

“No puedo controlar quién toque. Lo que puedo controlar es convencer a mis jugadores de defender bien a este club”, advirtió un Guardiola que no solo quiere épica. “Podemos mejorar el juego”, apuntó el técnico, que tras el 6-1 al Porto, provocó la risa de algunos periodistas.

Últimas noticias

Te puede interesar...

Últimas noticias