Santa Ana se alejó del sótano de la tabla al derrotar 2-1 a Guanacasteca, un triunfo que los dejó en la décima posición con 20 puntos, cinco más que Puntarenas, último lugar del torneo. Pero más allá de este resultado, el técnico Cristian Oviedo ya tiene su mirada puesta en el próximo reto: enfrentar a Saprissa en Tibás, donde planea dar pelea hasta el último minuto.
“Sabíamos que nos jugábamos la vida”
El técnico calificó el partido contra Guanacasteca como una auténtica final. “Sabíamos que estábamos al borde del último lugar. Lo planteamos como una final, y los muchachos lo entendieron. Patrick Pemberton hizo un partidazo, y los cambios nos dieron otro aire,” destacó Oviedo.
A pesar de las dificultades en el juego aéreo defensivo, un problema que señaló como recurrente, Oviedo resaltó la actitud ofensiva de su equipo: “Siempre quiero que mi equipo busque los partidos, no me gusta encerrarme. Aunque solo tenemos 20 puntos, el equipo ha mostrado cosas interesantes.”
Un proyecto con respaldo y proyección
Oviedo también aprovechó para agradecer a la directiva de Santa Ana y a la afición, destacando el compromiso detrás del proyecto. “Es un proyecto muy lindo y familiar. Desde que llegué, han creído en mí, y eso me motiva a seguir trabajando,” expresó.
El técnico adelantó que para la próxima temporada buscará refuerzos que aporten calidad y experiencia en la categoría, con el objetivo de seguir consolidando al equipo en la Primera División.
El reto en Tibás
El cierre de la fase regular será contra Saprissa en el Ricardo Saprissa, un encuentro que promete ser exigente para ambos equipos. “Sabemos que Saprissa puede llegar presionado si no gana contra Liberia, pero nosotros también necesitamos puntos. Vamos a planificar bien y darles a los jugadores las herramientas para hacer un buen partido,” aseguró Oviedo.
El técnico dejó claro que el objetivo es competir con inteligencia y carácter: “Hoy era una final, y nos van a invitar a otra. Estamos listos para pelear.”
Una advertencia al rival
Con Saprissa luchando por asegurar su clasificación y Santa Ana buscando cerrar el torneo con fuerza, el duelo en Tibás se perfila como una verdadera batalla. Cristian Oviedo no teme al reto y advierte: “Vamos a jugar con todo, porque aquí nadie se rinde.”