San José, 15 mar (elmundo.cr) – El portero brasileño Bruno Fernandes de Souza, volverá a jugar con un equipo de fútbol profesional luego de haber estado siete años en la cárcel y salir gracias a un beneficio otorgado por un Magistrado Brasileño.
A Bruno lo habían condenado a 22 años de prisión por habérsele comprobado que fue el autor intelectual del homicidio de su exnovia, la modelo Eliza Samudio, dicha condena fue impuesta por el Tribunal en primera instancia, pero los abogados del portero plantearon un recurso de apelación, por lo cual el caso pasó a una segunda instancia, misma que aún no se ha resuelto, casi siete años después, y esto generó que el magistrado Marco Aurelio Melo, le concediera la libertad hace un mes, y le impusiera medidas mientras el Tribunal de Apelación se pronuncie al respecto.
“Nada, absolutamente nada, justifica esa demora. La complejidad del proceso puede provocar un atraso en la apreciación de la apelación, pero jamás justificar tanto tiempo de custodia sin una condena de segunda instancia” mencionó el Magistrado.
El club que lo contrató es el Boa Esporte de la segunda división brasileña y su presidente, Rone Moraes da Costa, mencionó que el equipo no comete ningún tipo de delito al contratar al jugador, quien anterior a su condena era uno de los mejores portero de Brasil, jugando para el Flamengo, equipo más popular de Brasil, y con grandes oportunidades de formar parte de la Selección Carioca.
El entrenador da Costa comentó “El Boa Esporte Clube no fue responsable de soltar y liberar a Bruno” además añadió que el Club “le está dando trabajo a quienes quieren recuperarse”.
Esta decisión a causado mucha molestia por parte de aficionados y patrocinadores del conjunto brasileño, quienes rápidamente protestaron en las redes sociales.
El Boa Esporte se refirió por medio de una publicación argumentando “merece una nueva oportunidad como profesional. El club no tiene relación con las acciones personales de Bruno, ni con su pasado, habiendo contratado sólo al profesional”.
Los Hechos
En el 2010 Bruno fue arrestado, y declarado culpable en el 2013 por homicidio, secuestro y de esconder el cuerpo de su exnovia Eliza Samudio. La condena fue de 22 años de cárcel.
Días antes de la desaparición de la modelo, ella lo había denunciado ante una comisaría de la policía de Rio de Janeiro, por haberla agredido y secuestrado, también mencionó que el arquero la amenazó de muerte.
El conflicto entre ambos se debió a que su exnovia le pedía a Bruno que reconociera la paternidad de su hijo y le pagara la pensión.
Los constantes roces con su expareja ocasionó que Bruno la mandara a matar, en un acto totalmente planeado, y para el cual contrató a un policía llamado Marcos Aparecio, que junto al primo del arquero, Sergio Rosa, se encargaron de ejecutar el plan.
Rosa, confesó durante el juicio, haber sido el encargado de secuestrar a la mujer por orden de Bruno y que fue el policía Marcos (condenado a 22 años), el encargado de asesinar a la joven.
El portal “kienyke” aseguró que los restos de la mujer fueron lanzados a varios perros rottweiler para que los comieran y así desaparecer el cuerpo.
El cadáver de la mujer nunca apareció, situación que alegó la defensa del portero para que absuelvan a su representado, argumentando que “sin cuerpo no puede haber delito”.
Por ahora, el futbolista jugará en la segunda división del futbol brasileño mientras su situación jurídica se resuelve en segunda instancia.