San José, 12 de marzo (elmundo.cr)- . Álvaro Saborío llegó a la cita en el estadio Carlos Ugalde Álvarez con la agenda apretada. Un jeans gastado y unos zapatos de los que usa para trabajar en una de sus facetas en su querida Zona Norte.
Mandados van y vienen, las compras de todo lo que necesitan sus toros corren por cuenta de él. Un retraso en la compra de miel para sus “bestias” lo hizo llegar un poco tarde a la conversación, pero llegó como suele ser, un tipo sonriente (aunque por televisión no parezca) y de buen ánimo con quien tiene confianza.
En Mundo Deportes conversamos con él varios temas, La Sele, su paso por Alajuelense y la buena relación con la afición y lo cerrado del torneo nacional.
Además, explica que su única “desazón” fue no poder disfrutar de un juego a estadio lleno con la afición manuda, y espera que cuando todo el tema de salud mejore en el país por el tema de la Covid-19, se pueda organizar un juego en La Catedral con la mayoría de jugadores que ganaron la copa número 30.
— ¿Cómo valora su paso por Alajuelense?
– Muy importante, porque llegar a La Liga y salir campeón a los cinco meses me genera alegría y entusiasmo. Saber que jugué varios partidos, que pude anotar en varios de ellos, me llena de alegría. Puedo decir que di todo de mí, que si un compañero ocupaba un consejo, se lo dí, que si alguno ocupaba competir, competimos. Todo eso me llena de orgullo porque fui hacer lo que debía, el por qué me contrataron.
— Hay una foto de Bryan Ruiz y usted fundidos en un fuerte abrazo al final del juego donde Alajuelense consigue la 30, ¿qué representa esa imagen?
– La amistad que hemos tenido durante mucho tiempo. Ese último partido del campeonato no lo jugué y lo primero en lo que pensé fue en ir a buscar a Bryan y abrazarlo. Él tomó muchas responsabilidades para lo que fue la obtención del título. Es un referente del área, es un referente de la institución y creo que llegó en el momento indicado para el club, es el que guía a los jóvenes y a los no tan jóvenes que están hoy ahí.
Bryan, a pesar de la carrera tan extensa que tiene, vino aquí a competir y a darlo todo por el club, lo primero que pensé fue en ir a abrazarlo y decirle que lo logramos en el primer torneo que jugamos juntos.
— ¿Cómo definiría a la afición rojinegra en una sola palabra?
– Leal. Desde el día que llegué me respaldaron. Yo llegué ahí para respetar el escudo, para respetar la camiseta, para respetar la institución y respetar a los aficionados, hasta el día de hoy me tiene muy contento que me sigan respaldando de la manera en la que lo hacen.
— ¿Cómo se siente al ver que hoy no está en Alajuelense y el aficionado sigue celebrando sus goles?
– Muy feliz, a pesar de que estuve poco tiempo en la institución y ver la respuesta de la afición conmigo me alegra bastante. El respeto que me tienen y ver la felicidad de ellos con mis goles, me alegra mucho.
Me deja tranquilo el ver que salgo a la calle y me saluda un liguista o un saprisista me llena de entusiasmo porque reconocen mí carrera.
— ¿Es consciente que cada juego de esa Liga de la 30 se hubiese jugado a estadio a lleno? Soy del pensar que esa Liga merece un juego de conmemoración cuando se pueda recibir al público en los estadios.
– Eso también lo hablé con Bryan. Qué lástima que no podíamos vivir cada juego con la afición en el Morera Soto, estábamos convencidos de que el estadio estaría lleno en cada juego, participé ahí en contra de La Liga y la atmósfera ahí en el estadio es bonita, me hubiera gustado vivirla en el bando de la La Liga. Si se lograra organizar algún día un juego así, me gustaría estar ahí.
— ¿Cómo definiría el momento en el que recibe la llamada de Alajuelense?
– Lo defino como alegría, con orgullo de que se fijaran en mí. Pasó todo en un momento maduro de mi carrera y eso me hizo ver las cosas diferentes.
— ¿Imaginaba que eso llegaría a pasar?
– Por la etapa en la que estaba en mi carrera, puedo decir que tal vez no me la esperaba. Pero cuando llegó, no dudé en decir que sí.
— ¿Cómo la tomó?
– Lo tomé con mucha responsabilidad. Sabía lo que es La Liga y la institución a la que iba, todo eso me ilusionó en tomar el reto. Saber que había que ir y ganar un título era una tarea que todos nos íbamos a trazar me ilusionó. Me despertó ese gusanillo por competir, de hacerle llegar un título a una afición que lo merecía, todo eso me motivó a tomar la opción que se presentó.
— La Sele ocupa ganar sí o sí y para ganar se ocupan goles, ¿cómo vería un llamado a La Sele? No falta el que diga que estoy loco por preguntar esto, me dirán que usted está muy viejo, pero es un viejo que hace goles.
– Soy un jugador activo, si el entrenador me necesita yo voy a estar disponible. Hay que hacer un cambio generacional, es cierto, pero si se da la opción de que vaya, voy a ir.
— La afición quiere ver a la Tricolor ganar y para ganar se necesitan goles…
– Claro, ver a la Selección de que no gana, que baja puestos en el ranking de la FIFA perjudica a todos. Perjudica de que el jugador se venda, perjudica en que los fogueos sean importantes. Ocupamos que la Selección Nacional gane y se cotice internacionalmente.
— ¿Dónde está la clave para que todas las aficiones del país lo respeten como lo hacen hasta el día de hoy?
– Entregándome al máximo a mi carrera. Siempre me entregué al máximo, de ser una persona positiva y creo que eso me lo respalda hoy el aficionado.
— ¿Hasta cuándo Álvaro Saborío?
– Hasta que deje de disfrutar. Desde que debuté disfruto cada juego y esto se acabará hasta que deje de disfrutar lo que hago.
— ¿Cómo se siente hoy?
– Después de mi paso en La Liga, que creo que fue muy bueno, regreso aquí donde me abrieron las puertas de nuevo. Pero bien, la verdad me siento muy bien, contento.
— Este torneo que se juega con 12 equipos está al rojo vivo, ¿cómo se imagina el cierre de la fase regular?
– Cerrado. Hasta el equipo que está hoy de último lugar, con dos buenos juegos y puede subir muchos puestos. Los equipos tienen que ser constantes y lograr una seguidilla de triunfos que nos permitan despegarnos, el único que lo ha podido lograr es La Liga, por ahora. Esperamos nosotros revertir esta racha que tenemos de no ganar y lograr subir posiciones.
“Eso también lo hablé con Bryan. Qué lástima que no podíamos vivir cada juego con la afición en el Morera Soto, estábamos convencidos de que el estadio estaría lleno en cada juego, participé ahí en contra de La Liga y la atmósfera ahí en el estadio es bonita, me hubiera gustado vivirla en el bando de la La Liga. Si se lograra organizar algún día un juego así, me gustaría estar ahí”.
