El técnico de Alajuelense, Alexandre Guimaraes, abordó con firmeza las críticas surgidas tras la derrota en el clásico ante Saprissa, algunas de las cuales provinieron de figuras destacadas como el exjugador Rolando Fonseca. Fonseca, quien conoce bien la presión de un clásico y tiene experiencia en ambos equipos, manifestó en Teletica Deportes Radio su opinión sobre la falta de identidad y determinación del equipo manudo en ese partido. El goleador, máximo anotador en clásicos, opinó que solo los centrales y el portero demostraron entrega, mientras que el resto del equipo, según él, no mostró carácter ni entendió lo que significa jugar un clásico.
Tras la reciente victoria de Alajuelense sobre Sporting por 1-0, Guimaraes respondió indirectamente a estas críticas, destacando la resiliencia del equipo y la presión especial que enfrentan como líderes del torneo. “Pareciera que la exigencia es solo para un equipo. Nuestra exigencia es jugar para ganar, y los jugadores volvieron a entender eso,” afirmó el técnico, sugiriendo que Alajuelense carga con una demanda única en el campeonato. Además, Guimaraes enfatizó su experiencia y confianza en su proceso, dejando claro que las opiniones externas no afectarán su enfoque: “A estas alturas de mi carrera, no voy a dejarme amilanar por lo que diga o no diga alguna gente. ¡Hombre!, ya tengo mi edad.”
Guimaraes fue más allá y se refirió directamente a quienes emiten críticas sin haber experimentado situaciones similares cuando eran futbolistas: “Hay gente que emite ciertos criterios y que, cuando fueron futbolistas, no pasaron por esta misma situación. Es increíble que se cuestione la campaña que está haciendo Liga Deportiva Alajuelense. Esto es completamente surrealista.” Con Alajuelense firme en el primer lugar, Guimaraes recalcó la seriedad del trabajo realizado y el compromiso del equipo. “El grupo de futbolistas está realmente consciente de lo que debe hacer. Después del partido perdido, recobraron la fortaleza anímica, y el equipo hoy lo demostró,” dijo.
Finalmente, el técnico brasileño defendió su posición, dejando entrever que, aunque todos tienen derecho a opinar, “no todas las opiniones son respetables.”