Liga Deportiva Alajuelense deberá enfrentar la final de la Copa Centroamericana de Concacaf contra el Real Estelí con una reducción del 20% en el aforo permitido en el Estadio Alejandro Morera Soto. Esta sanción fue impuesta por Concacaf debido a problemas de seguridad relacionados con la ocupación de zonas amarillas, que deberían mantenerse libres para evitar sobrecupo y facilitar una evacuación segura en caso de emergencia.
Marco Vásquez, vocero de Alajuelense, explicó que la Confederación Norteamérica, Centroamérica y el Caribe de Fútbol (Concacaf) les impuso esta medida tras identificar una ocupación indebida en las zonas de seguridad durante el partido contra Antigua GCF en semifinales. “En nuestro caso, desde el punto de vista de seguridad, volvemos a lo de siempre: necesitamos que los aficionados respeten las líneas amarillas, y que nuestro personal de seguridad también ayude en eso”, declaró Vásquez, haciendo un llamado a los hinchas para que apoyen respetando las normas y previniendo sanciones futuras.
Concacaf sanciona a ambos finalistas
La sanción no se aplicó únicamente al equipo manudo, sino también al Real Estelí, club nicaragüense que recibió la misma advertencia de Concacaf por situaciones similares en su enfrentamiento con Herediano. Ambos equipos deberán tomar medidas para mantener las zonas de seguridad libres de aficionados y evitar así una posible repetición del castigo. Al no existir un comité de apelaciones para este tipo de sanciones, Alajuelense acatará la disposición de Concacaf.
Reducción en el aforo y ubicación de la sanción
Aunque todavía no se ha determinado qué área del estadio quedará inhabilitada, es probable que, como ocurrió en una sanción similar en diciembre del año pasado, se elija el sector popular norte. En aquella ocasión, la Liga tuvo que cumplir con una restricción de aforo tras disturbios en un partido con Herediano que involucró a jugadores y afectó la seguridad del evento.
“Le proponemos a Concacaf un sector, que podría ser el popular norte, ya que es el último en llenarse. El castigo implica menos ingresos en taquilla, pero principalmente menos aficionados apoyando al equipo, y eso es un problema”, enfatizó Vásquez, quien lamentó la situación, ya que se busca que la final se juegue en un estadio repleto de seguidores.
Un llamado a la responsabilidad y respeto a la seguridad
La dirigencia de Alajuelense reitera la importancia de la cooperación de sus seguidores para cumplir con las normativas y evitar futuras sanciones. “Dado que no hay manera de apelar esta sanción, debemos enfocarnos en la educación del aficionado y en entrenar mejor al personal de seguridad para mantener las áreas libres de gente”, agregó Vásquez.
El partido de ida de la final se jugará el 27 de noviembre en Estelí, Nicaragua, mientras que la vuelta será el 4 de diciembre en el Estadio Alejandro Morera Soto, en lo que promete ser un cierre intenso de la Copa Centroamericana, a pesar de las restricciones de aforo impuestas por Concacaf.
