San José, 15 feb 2015 (elmundo.cr) – ShaoLan una joven empresaria de origen taiwanés que vive en Londres creo Chineasy, un método mnemotécnico que facilita la tarea de aprender chino. Permitiendo comprender que en la cultura china la escritura es hasta cierto punto, indisoluble de la imagen.
El chino está compuesto por más de 20 000 caracteres, pero con 200 caracteres que se conozcan se puede comprender un 40% de la información contenida en textos periodísticos sencillos y leer sin dificultad el menú de los restaurantes.
ShaoLan se ha dedicado a estudiar los ideogramas más comunes, identificando más de 100 componentes que se repiten y ha asociado cada uno de ellos a una imagen que permita recordar su significado. Al combinar varios de estos componentes se pueden crear nuevos y más complejos caracteres.
Por ejemplo, cuando aprendamos cuál es el ideograma empleado para representar el concepto “persona”, será relativamente sencillo que asimilemos también el que significa fuego, pues sólo debemos pensar en un hombre asustado que intenta escapar de las llamas. Del mismo modo, si unimos tres de los caracteres que indican “mujer” tendremos como resultado “discusión”.
Chineasy es un método de aprendizaje innovador y muy útil que aprovecha la potencialidad visual que define la escritura china, cuyos caracteres no representan sonidos, como sucede en la cultura occidental, sino conceptos: acciones, acontecimientos, objetos o ideas abstractas.
Cada ideograma tiene autonomía semántica, siendo un universo cerrado desde el punto de vista del significado. Siendo esta peculiaridad causa y consecuencia de todo un sistema de pensamiento muy diferente al occidental.
La escritura china es una forma de arte, que desempeña un rol central en su cultura, siendo considerada la fuente de todas las artes plásticas. Por lo cual la presencia de caracteres aislados en papel u otros soportes representan objetos artísticos.
El proyecto representa para ShaoLan un retorno a sus orígenes, pues su madre, calígrafa de profesión, le enseñó desde muy pequeña los secretos del arte de la escritura. Desde esta perspectiva, su proyecto adquiere significaciones que impiden considerarlo simplemente como un método de aprendizaje inusual. A la vista de los resultados, las ilustraciones que nos permiten recordar el significado de los ideogramas, observamos cómo también en Chineasy escritura e imagen, comunicación y artes pláticas convergen como dos caras de la misma moneda.
