UNA recomienda uso de mascarilla N95 para prevenir histoplasmosis en cuevas

San José, 26 mar (elmundo.cr) – La Escuela de Medicina Veterinaria (EMV) de la Universidad Nacional (UNA) respalda la recomendación del Ministerio de Salud de utilizar mascarillas N95 al ingresar a cuevas, con el fin de prevenir la inhalación de las esporas del Histoplasma capsulatum, hongo microscópico responsable de la histoplasmosis.

Esta medida surge tras la alerta emitida por la Embajada de los Estados Unidos, luego de que 12 turistas norteamericanos fueran diagnosticados con la enfermedad tras visitar las Cavernas de Venado en San Carlos en diciembre pasado.

Condiciones propicias para el hongo

Alejandra Calderón, investigadora del laboratorio de Micología de la UNA, explicó que el Histoplasma capsulatum habita en el ambiente, pero requiere humedad, temperatura adecuada y altas cantidades de nitrógeno para desarrollarse.

“Las cuevas son el refugio natural de los murciélagos, y sus excrementos (guano) aumentan la dispersión del hongo en el aire, lo que incrementa el riesgo de inhalación de sus esporas”, detalló.

Por ello, la experta enfatizó la importancia del uso de mascarilla durante el recorrido por cavidades subterráneas, especialmente cuando se observan colonias de murciélagos.

“Antes de visitar una caverna, es recomendable informarse sobre las condiciones climáticas y las advertencias del sitio. En ciertas épocas del año, el guano aumenta considerablemente, lo que incrementa el riesgo de exposición”, advirtió Calderón. Además, recalcó que “no se debe confiar en un buen estado de salud o en defensas óptimas, ya que la enfermedad puede afectar a cualquier persona”.

Protección y conservación de los murciélagos

La investigadora también hizo un llamado a los turistas a respetar la fauna local y evitar cualquier agresión hacia los murciélagos. “Son esenciales para el ecosistema, ya que cumplen funciones clave como la polinización y el control de plagas”, explicó.

Asimismo, advirtió que las alteraciones en su hábitat, como la deforestación, el ruido excesivo y la contaminación lumínica, pueden obligarlos a migrar a entornos urbanos. “El uso desmedido de plaguicidas también representa una amenaza para su conservación”, agregó.

Histoplasmosis en humanos y mascotas

El Histoplasma capsulatum no solo representa un riesgo para los humanos, sino también para otros mamíferos, como perros y gatos. “Las mascotas pueden contraer la enfermedad al inhalar esporas del hongo presentes en excretas de murciélagos y aves, ya sean domésticas o silvestres”, mencionó Calderón.

Los síntomas en los animales varían y pueden incluir problemas digestivos, fiebre, dolor al caminar y la formación de masas en la piel u otros órganos. Sin embargo, aclaró que “un perro o un gato con histoplasmosis no transmite la enfermedad a los humanos, sino que se enferma por la misma vía: la exposición a un ambiente contaminado”.

Ante esta situación, la UNA reitera la importancia de la prevención, el respeto por la biodiversidad y la consulta médica ante cualquier síntoma sospechoso tras la exposición a estos entornos.

Últimas noticias

Te puede interesar...

Últimas noticias