![](https://i0.wp.com/www.elmundo.cr/wp-content/uploads/2016/07/Solar-Geote%CC%81rmica-Miravalles.jpg?resize=755%2C490)
Redacción, 30 ene (elmundo.cr) – La planta geotérmica Miravalles III cumple este lunes una semana completa de generar electricidad, luego de que fueran reparados los daños causados tras el paso del huracán Otto por Costa Rica, en noviembre del 2016.
La geotérmica, propiedad del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) había salido de operación en noviembre, tras detectarse importantes daños en las tuberías de trasiego de fluidos geotérmicos.
Los daños también afectaron parcialmente a Miravalles I, que funcionó con normalidad a partir del 2 de diciembre y alternó desde ese día su producción con Miravalles II, debido a la alta disponibilidad de recursos eólicos y a filo de agua.
Los conductos afectados por Otto cruzaban en siete sectores el cauce de la quebrada Hornillas, sitio por donde pasó una de las avalanchas provocadas por el desprendimiento de materiales de las laderas del volcán Miravalles.
Además de la reparación de estas estructuras, los trabajos incluyeron la construcción de las cimentaciones y el montaje de las tuberías para restablecer las reinyecciones en frío y caliente de esa central.
“Tras la restauración de las tuberías afectadas, Miravalles III estuvo disponible para generar desde el 6 de enero. Su producción se requiere a partir de hoy por la suficiencia de recursos renovables de las semanas anteriores, que permitieron atender la demanda eléctrica nacional con las plantas hidroeléctricas y eólicas”, explicó Luis Pacheco, gerente de Electricidad del ICE.
Con este restablecimiento, Miravalles III –ubicada en La Fortuna de Bagaces– aporta 27 megavatios de generación firme al Sistema Eléctrico Nacional (SEN).
Salvador López, director del Centro Nacional de Control de Energía (CENCE), explicó que “la operación alternada de Miravalles I y Miravalles II sirve para controlar la frecuencia eléctrica del SEN. Es una práctica que el CENCE ha dispuesto en otros años, cuando baja la demanda eléctrica y hay abundancia de recursos renovables variables, como sucedió durante las últimas siete semanas”.
El CENCE monitorea ininterrumpidamente la disponibilidad de los recursos renovables –agua, geotermia, viento, sol y biomasa–, en que se basa la matriz eléctrica nacional, que en los últimos dos años superó 98% de generación limpia.
“La abundancia de fuentes renovables ha permitido mantener nuestros embalses por encima de lo pronosticado. Optimizaremos toda esa agua para no verterla y entrar al verano en las mejores condiciones”, finalizó Alberto Ramírez, director de Generación del ICE.