San José, 5 may (elmundo.cr) – El Presidente Luis Guillermo Solís se cansó de las críticas de diputados de Liberación Nacional, quienes lo acusan de haberse adjudicado obras empezadas en gobiernos anteriores, durante su último informe sobre el Estado de la República.
Solís respondió este viernes a los señalamientos de que mucho de los logros que manifestó durante su discurso del pasado miércoles, así como lo contenido en el “Mapa de Obras” que lanzó días atrás, es en su mayoría infraestructura gestionada durante la Administración de Laura Chinchilla.
“La obra pública en Costa Rica no es de nadie excepto del pueblo que la paga. No es de este Gobierno y no es de los anteriores. El que siga diciendo eso está engañando al pueblo de Costa Rica y eso no se vale”, dijo Solís en el sitio donde se construirá el nuevo puente entre Belén y San Rafael de Alajuela.
Y agregó: “La obra pública es pública. Empieza y termina en un determinado plazo; esos plazos a veces rompen las fronteras de una administración a otra y se asume de una a otra alguna de ella y se lega de una a otra otra parte de ella. Esta obra por ejemplo la va a inaugurar el próximo Gobierno una semana o dos después de entrar ¿y qué? Acaso que yo puse mi plata para hacer este puente…. Acaso que Liberación Nacional puso de su presupuesto para hacer la obra durante Administración Chinchilla ¿van a seguir con eso?”.
El Mandatario recordó que el pueblo de Costa Rica paga impuestos o se endeuda para hacer la obra que necesita y si la termina un Gobierno u otro es secundario.
“Mucha obra de la que se recibe está atascada o muy atrasada en su ejecución ¿y qué? No me toca a mí como responsable de esta cosa en el Gobierno junto a las instituciones y la Asamblea Legislativa sacarla? Aquí están diciendo que la obra es nuestra como si nos hubiéramos inspirado para hacerla”, señaló el Presidente.
Y continuó: “El día que algún político de este país ponga de su plata de su bolsa para hacer un puente, una calle, una ciudadela o una escuela que ponga las placas que le dé la gana. Me parecería un acto bastante polo y bastante feo, dicho sea de paso… pero si quiere hacerlo que lo haga; pero mientras eso no sea así y la obra pública se haga con la plata de todos nosotros entonces atribuírsele es una desvergüenza y no es aceptable”.
Solís concluyó su manifestación, afirmando que esos señalamientos son más politiquería que debate político de fondo.
“Si quieren que entremos en ese debate, hay ministros que están dispuestos a entrar en ese debate”, finalizó.
