San José, 20 sep (elmundo.cr) – La Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) culpó a la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) por el nuevo anuncio de aumento de los combustibles de ₡71 en el diésel, ₡36 en la gasolina regular y ₡23 en la gasolina súper.
En este nuevo estudio tarifario, Aresep debe observar los precios en el mercado internacional del 11 de agosto al 7 de setiembre del 2023. En dicho periodo, los precios del diésel oscilaron entre $124 y $132 por barril, mientras que las gasolinas se adquirieron a menores precios.
Según Recope en este contexto, lo que hubiese correspondido para este nuevo ajuste tarifario era que no subieran las gasolinas y que el diésel sufriera un leve aumento a nivel nacional, sin embargo, Aresep ha anunciado aumentos importantes en estos combustibles, producto de que la metodología tiene problemas.
La metodología tarifaria utilizada por Aresep indica que en esta ocasión (setiembre 2023) corresponde observar los precios internacionales y diferencias tarifarias ocasionadas por la aplicación de la misma metodología. Estas diferencias tarifarias son, precisamente, las que incidirán en un aumento en los precios.
El problema radica que al momento de fijar las tarifas en periodos anteriores, la Aresep en lugar de utilizar facturas, utilizó estimaciones que no se ajustaron a la realidad y ahora tendrá que enmendar esas diferencias, asegura Recope.
En reiteradas ocasiones, Recope ha solicitado corregir esa distorsión metodológica, con el fin de no afectar a los consumidores.
Juan Manuel Quesada, presidente de Recope, manifestó que “lamentablemente, otra vez, los usuarios van a sufrir una afectación a su bolsillo por problemas ocasionados por Aresep en las metodologías tarifarias”.
“Estas son cosas que se pudieron haber corregido fácilmente; sin embargo, meses después, Aresep no ha logrado solucionarlo”, concluyó.