Heredia, 15 abr (elmundo.cr) – La relación entre el cambio climático y la incidencia de enfermedades tropicales infecciosas en comunidades rurales es objeto de estudio durante el periodo julio 2023 a diciembre de 2024 con el proyecto Percepción de la influencia del cambio climático en la incidencia enfermedades tropicales infecciosas: El caso de Cuajiniquil, La Cruz, Guanacaste, Costa Rica.
Pável Bautista, académico investigador Sede Regional Chorotega de la Universidad Nacional (UNA), destacó que este estudio se realiza ante las afectaciones de poblaciones rurales mesoamericanas por enfermedades transmitidas por vectores como el dengue, zika y fiebre amarilla, que perjudican a la población costarricense, con consecuencias potencialmente mortales, especialmente en infantes.
Hugo Hidalgo, del Centro de Investigaciones Geofísicas (Cigefi) de la Universidad de Costa Rica (UCR) destacó que el estudio cobra sentido ante la escasez de información meteorológica y la necesidad de utilizar datos combinados de estaciones meteorológicas y satélites para comprender mejor estos fenómenos.
El proyecto, denominado EcoSalud, lo financia la Icahn School of Medicine at Mount Sinai, y cuenta con un presupuesto de $20.000. Su objetivo es fortalecer la adaptación de comunidades rurales al cambio climático, específicamente en el sector de la salud; asimismo, busca conocer la percepción local sobre la relación salud y cambio climático.
Cuajiniquil, donde se realiza el estudio, es una comunidad rural costera y transfronteriza con una población aproximada de 4.200 personas, cuyas principales actividades económicas son la pesca y el turismo.
La comunidad se ubica en el distrito de Santa Elena, en un área con importantes espacios protegidos como el Parque Nacional Santa Rosa y el Refugio de Vida Silvestre Junquillal.
Logros del proyecto
Algunos logros del proyecto hasta ahora son la coordinación con socios institucionales y locales, así como la restauración del manglar Salinitas y la capacitación de estudiantes universitarios en prácticas relacionadas con el proyecto, incluyendo el desarrollo de un sistema de potabilización de agua de lluvia.
Entre los socios involucrados en el proyecto están el Centro Mesoamericano de Desarrollo Sostenible del Trópico Seco (Cemede-UNA), el Cigefi-UCR, el Centro de Investigación en Enfermedades Tropicales (Ciet-UCR), la Asociación de Desarrollo Integral de Cuajiniquil, el Comité Comunal de Emergencias de Cuajiniquil, y el Área de Conservación Guanacaste.
Elsa Orozco, estudiante de ingeniería hidrológica y Erick Arguello, estudiante de Administración, participantes en el proyecto, resaltan que estas comunidades son particularmente vulnerables a los efectos del cambio climático debido a la falta de apoyo gubernamental y de recursos, lo que puede afectar negativamente su acceso a servicios de salud y a recursos naturales vitales como el agua potable.
Además comentaron que desde sus áreas de especialización pueden promover mejoras en las comunidades con proyectos de aprovechamiento de recursos naturales en áreas con escasez de agua potable.
De igual forma, sugieren implementar campañas informativas y de colaboración con las comunidades para fomentar el cuidado de la naturaleza, así como el aumento de la plantación de árboles y la protección de los manglares.