San José, 8 oct (elmundo.cr) – El expresidente de la República, Oscar Arias, manifestó su posición ante la situación que enfrenta el país.
Arias señaló que “en estos días hemos visto con sorpresa, con indignación y preocupación el descenso del país del un espiral de bloqueos y enfrentamientos perpetrados por un grupo minúsculo que se ha rogado de manera ilegítima la representación del pueblo”.
“Ellos pretenden ahora imponernos su voluntad por la vía de la fuerza, esto es algo que como sociedad no podemos permitir, sin importar nuestra filiación política o nuestra tienda ideológica debemos rechazar categóricamente estas acciones y exigir el cumplimiento de la ley”, agregó.
Arias manifestó que “la ingobernabilidad solo se vence reafirmando el poder de quienes fueron electos para gobernar, en ninguna democracia los grupos de facto están por encima de los representantes elegidos en las urnas por el pueblo. Costa Rica es un estado de derecho, eso quiere decir que nuestros conflictos se resuelven en las instituciones, no en las calles, las únicas personas que han recibido un mandato para actuar en nombre de la ciudadanía son las autoridades electas”.
El expresidente indicó que “hoy quiero sumarme a quienes exigen de nuestro gobierno acciones más enérgicas, hoy quiero insistir en la importancia de que nuestros conflictos se ventilen en las instancias previstas para esos afectos y que usemos herramientas políticas para navegar este momento crítico”.
“La política muchas veces es frustrante, pero la ausencia de política es el caos y la violencia”, añadió.
Para Arias “vivimos uno de los episodios más difíciles en la historia reciente de nuestro país, al dolor ocasionado por la emergencia sanitaria y la pérdida de seres queridos se suma también la angustia de la crisis económica que nos ha golpeado al igual que al resto del mundo”.
De igual manera, expresó que “en las próximas semanas y los próximos meses debemos adoptar decisiones complejas que requerirán una cuota de sacrificio, pretender cómo pretenden estos grupos agresivos que podemos salir adelante sin ser en nada, no sólo es un error, sino una vil mentira que nos puede salir muy cara”.
“En momentos como éste se decida el carácter de las naciones, vemos una vez más un ejemplo de institucionalidad de mesura y de capacidad de negociación y tengamos esperanza”, insistió el exmandatario.
El liberacionista recalcó que “a lo largo de casi 200 años hemos construido un sistema político diseñado para encontrar soluciones, confiemos en la democracia confiemos en la democracia que nos ha dado paz y libertad, confiemos a la democracia que nos ha dado derechos y oportunidades, confiemos a la democracia que nos ha dado un país que con todos sus defectos tiene también incontables bendiciones”.
“Atravesamos una noche oscura, pero no es una noche eterna, saldremos adelante como un único país bajo una única bandera con la madurez de quién comprende que las democracias no se desesperan, sino que buscan acuerdos y encuentran salidas”, sostuvo.
“El uso de la violencia no es parte de la idiosincrasia del ser costarricense, en palabras de Martin Luther King: la debilidad fundamental de la violencia es que constituye una espiral descendente, que engendra precisamente lo que busca destruir; en lugar de reducir el mal lo multiplica. Por medio de la violencia se puede matar al mentiroso pero no se puede matar la mentira ni establecer la verdad, por medio de la violencia se mata el que odia, pero no se mata al odio; de hecho. la violencia solamente aumenta el odio y eso mis queridos amigos es precisamente lo que Costa Rica no se merece”, concluyó.