San José, 2 feb (elmundo.cr) – El Sistema de las Naciones Unidas presentó el “Plan de preparación y respuesta a las personas en tránsito”, población que es parte de los flujos migratorios mixtos que se registran en Costa Rica.
Dicho plan, es el resultado de la articulación de la Oficina de la Coordinadora Residente de las Naciones Unidas en Costa Rica, Allegra Baiocchi con agencias del sistema, entre ellas, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), la Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS), y el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
En su desarrollo hubo consultas con instituciones del Estado y organizaciones de la sociedad civil.
El plan busca apoyar al país en el fortalecimiento del abordaje y asistencia integral básica de las poblaciones migrantes en condición de vulnerabilidad que son parte de los flujos migratorios mixtos en su tránsito por el territorio nacional.
“Tomar la decisión de dejar un país, huyendo o buscando mejores oportunidades, es per se un proceso de gran repercusión personal y familiar. Consecuentemente, el arribo de creciente número de personas en movilidad tiene un impacto inconmensurable, y este ha sido el caso para Costa Rica”, expresó el viceministro de Asuntos Multilaterales, Christian Guillermet, durante la actividad.
El viceministro recordó que uno de los efectos socioeconómicos de la pandemia de COVID-19 ha sido un incremento en el número de personas que ingresan a Costa Rica en su camino a un tercer país, especialmente Estados Unidos, donde esperan poder progresar.
Aunque están de paso en Costa Rica, el Gobierno ha considerado necesario convocar a representantes de gobiernos amigos y otros socios cooperantes internacionales para analizar los efectos de este flujo de personas.
Según datos divulgados por el Sistema de las Naciones Unidas, en el 2022 se contabilizaron más de 226.000 personas entrando por la frontera sur, un incremento de casi 80% más en relación con el 2021. La mayoría son de nacionalidad venezolana.
Otras se identifican como originarias de Haití, Cuba, Bangladesh, República Democrática del Congo, El Salvador, Guatemala, Camerún, Nigeria, Senegal, Ghana, Nepal, entre otros.
La presentación del Plan se realizó en el Hotel Crown Plaza Corobicí por parte de la Coordinadora Baiocchi. En el evento, la viceministra de Gobernación y directora de Migración y Extranjería de Costa Rica, Marlen Luna, disertó sobre los principales retos del país para afrontar la situación migratoria y humanitaria actual.
“Costa Rica ha sido un referente internacional de protección de los Derechos Humanos y este plan de acción es una herramienta fundamental para trabajar junto al país, dando apoyo al Estado y sobre todo enfocándose en proteger los derechos y la dignidad de las personas migrantes y refugiadas que más lo necesitan”, destacó la Coordinadora de ONU.
Los objetivos generales de este plan son:
1. Salvar vidas de personas en tránsito, incluyendo niños, niñas y adolescentes, por medio de una asistencia humanitaria oportuna, integral, de calidad, priorizando los principios de protección y tomando en cuenta las necesidades diferenciadas por grupo de edad, género, discapacidades, así como otros elementos de diversidad.
2. Asegurar que la entrega de asistencia y acceso a servicios se realicen bajo un enfoque de Derechos Humanos y Derechos de la Niñez, previniendo violaciones de derechos humanos y evitando todo tipo de abuso y violencia. También se trabajará para garantizar el acceso al sistema de asilo para las personas con necesidades de protección internacional, regularización migratoria y otros servicios.
3. Fortalecer la respuesta de las autoridades gubernamentales bajo un enfoque de complementariedad.
Las áreas de atención definidas incluyen la provisión de alojamiento, asistencia alimentaria, provisión de agua, saneamiento e higiene, acceso a la salud y educación, protección, retornos, integración, y la gestión de información y comunicación.
Para este año, Naciones Unidas anunció que tiene identificados 342 millones de colones para financiar este plan. Sin embargo, reconoció que se requieren más de 6.700 millones de colones para asegurar su total cumplimiento.
