San José, 11 oct (elmundo.cr) – Al cierre del octavo mes del año, las finanzas del gobierno central registraron un superávit primario del 0,9% del PIB, equivalente a ¢438.363 millones.
La mejora neta registrada en los ingresos totales, por un monto de ¢104.760 millones (0,2% del PIB de 2024), junto con la variación neta positiva en el gasto primario, excluyendo intereses, de ¢316.195 millones (0,6% del PIB de 2024), explican que el balance primario sea ¢211.435 millones (0,4% del PIB de 2024) menor en comparación con agosto de 2023, cuando alcanzó ¢649.797 millones (1,4% del PIB).
El déficit financiero, que representa la brecha entre los ingresos y los gastos totales, pasó de 2,0% del PIB en el 2023 a 2,5% del PIB en el 2024, lo que equivale a un deterioro de 0,5 p.p de PIB.
Esto se debe al bajo crecimiento de los ingresos, especialmente de los tributarios, y al incremento del gasto de un año a otro, impulsado por el aumento de las transferencias corrientes al sector público, las remuneraciones, el pago de intereses de la deuda y el gasto de capital.
Los ingresos totales crecieron 2,2% interanual, contrario a la caída de 2,3% registrado a agosto del 20234. Este aumento se explica, principalmente, por el crecimiento registrado en los ingresos tributarios, que ha mejorado levemente, seguidos por las contribuciones sociales e ingresos no tributarios, que crecieron interanualmente en 1,4%, 5,9%, y 18,9%, respectivamente.
Sin embargo, en comparación con el PIB, la proporción de los ingresos totales pasó de 10,0% en el 2023 a 9,8% este año, manteniendo una diferencia negativa de 0,2 p.p del PIB.
Por su parte, los ingresos tributarios continúan mostrando una recuperación marginal, con una tasa de crecimiento interanual del 1,4%, inferior al 3,7% registrado en el mismo periodo de 2023. Al comparar su proporción respecto al PIB, pasaron de representar el 8,9% en 2023 al 8,7% en 2024, lo que refleja una disminución de 0,3 p.p del PIB.
Ante esto, el ministro de Hacienda, Nogui Acosta, señaló que “desde el Ejecutivo, seguimos trabajando para alcanzar superávit primario, pero mantenerlos es responsabilidad de todos. Iniciativas de ley que vienen a erosionar los ingresos y generar nuevos compromisos sin proponer alternativas de financiamiento, así como evadir el pago de impuestos, sea por elusión o evasión, flaco favor le hace al país”.
“Acciones irresponsables como estas solo comprometen la estabilidad fiscal y se traducen en menos posibilidades de liberar recursos que necesitamos para atender las prioridades que aseguren el bienestar social”, agregó.
Acosta aseguró que la Administración Chaves Robles seguirá gestionando las finanzas públicas de manera responsable, por medio de una mejora en la gestión de la deuda pública, y acciones para reducir el endeudamiento y aumentar la recaudación, siempre con un objetivo claro: reducir la relación deuda a PIB por debajo del 60% en el menor tiempo posible.
Para el jerarca “considerar que el problema fiscal está resuelto porque hemos logrado mantener un superávit primario desde inicios de año, es un grave error. Queda camino por recorrer y decisiones importantes que tomar, la brecha entre ingresos y gastos sigue siendo alta”.
“A agosto, el déficit financiero alcanzó el 2,5% del PIB y nuestro Marco Fiscal de Mediano Plazo proyecta que podría cerrar en 3,7% del PIB. Por eso, insistir en defender proyectos de ley que reducen la recaudación, no avanzar en la discusión de iniciativas de ley que fortalecerán la recaudación e incumplir las obligaciones que como ciudadanos tenemos con el país, solo alargará más el problema fiscal en el tiempo, perjudicando, principalmente, a la población más vulnerable”, concluyó.