San José, (elmundo.cr)- El candidato a rector de la Universidad Nacional (UNA), Leiner Vargas explicó las razones por las que aspira a llegar a estar al frente de la Rectoría y los planes que tiene su administración, que cuenta con el conocimiento y apoyo de Inés Revuelta, como rectora adjunta.
Vargas, quien es Doctor en Economía, comentó que la aspiración a ser rector nace de su deseo de ayudar al desarrollo de la universidad.
“Creo que la Universidad Nacional me necesita, necesita una persona conocedora del entorno económico, del entorno social y conocedora de la Universidad y de la gestión universitaria”, aseguró.
Para Vargas, el nuevo rector debe tener “la capacidad para conducir un equipo de trabajo, tomar las medidas que se requieren para asegurar la tranquilidad y la confianza en los universitarios, y colaborar sobre todo con este país para que podamos volver a crecer después de la crisis del COVID-19”.
“Estimo muchísimo a esta institución, yo fui estudiante becado Omar Dengo, entré el año 1985 a la Universidad Nacional, a estudiar economía, tuve la oportunidad de sacar el bachillerato y la licenciatura, fui el primer universitario en mi familia gracias a la UNA”, agregó.
Además señaló que lleva muchos años trabajando en la gestión pública, por lo que cuenta con una amplia experiencia “estuve dos años y medio en México haciendo mi maestría, luego retorné, fui director, y fui vicerrector de desarrollo; y luego tuve la oportunidad gracias a una beca, de ir a otro país a realizar mi doctorado y luego regresé y he hecho por 12 años trabajo en el tema de gestión pública”.
En cuanto a lo que viene después de la pandemia para la universidad, Vargas indicó que en la UNA “nosotros, hemos tenido un antes y un después, nos ha tocado tomar medidas inéditas en relación con la gestión, por ejemplo en lo académico, los cursos están en presencialidad remota como casi toda la educación costarricense; si bien ya habíamos tenido algunas experiencias en educación bimodal, en educación virtual, eso no era lo común, era más lo presencial”.
Sin embargo, “se ha hecho un esfuerzo de parte de los académicos para enfrentar ese desafío, creo que en buena parte ha habido un éxito en términos de la posibilidad de tener plataformas y esquemas para comunicarnos de una forma solvente; pero estamos a medio camino en lo que es el diseño pedagógico, el desarrollo de contenidos, la posibilidad de que nuestros estudiantes de menos recursos tengan acceso a anchos de banda y a conectividad de alguna manera que le permita poder participar en igualdad de condiciones sobre todo, de los que están en el área central del país”, comentó.
Vargas enfatizó en que a pesar de que “hay desafíos, de ambos lados, desafíos en lo académico y desafíos en lo tecnológico; yo creo que la UNA tiene el potencial para poder en los próximos meses, convertir una buena parte de la docencia que antes era docencia presencial, en docencia virtual, y apuntalar un esquema de trabajo que nos permita regresar a la nueva normalidad, que de alguna u otra forma vamos a tener”.
De igual forma, hizo hincapié en los nuevos retos, y planteamientos que tiene la UNA, y su futura administración en caso de quedar electo como rector, “tenemos que ser capaces de sostener académicamente a la institución, y eso significa ser capaces de mantener a nuestros estudiantes, mantener la dinámica académica post pandemia; en un país que va a estar, de alguna manera, más empobrecido, en un país que va a requerir una tremenda ayuda de parte de la Universidad”.
“No tanto en términos monetarios, por supuesto que nuestros estudiantes van a requerir un mejor acondicionamiento de sus becas y de su entorno tecnológico, pero sobre todo el país va a requerir, los sectores productivos, el sector privado, va a requerir un esfuerzo conjunto con la Universidad y el gobierno, para empujar a la economía a la nueva condición que necesitamos”, añadió.
Vargas sostuvo que “el reto principal que tiene la próxima gestión, es el de la sostenibilidad financiera; la Universidad vive del financiamiento del sector público, y el sector público está en una situación crítica. El tema fiscal es claramente un problema de larga data, pero también se ha profundizado y seguramente va a profundizarse aún más con la consecuencia del COVID-19”.
De tal manera que para el economista “la UNA tiene que hacer más con menos, tiene que hacer un esfuerzo doble y dar la milla extra en esta carrera; y yo estoy convencido de que con el conocimiento y con un buen equipo podemos tomar las medidas sin afectar a la familia universitaria, es decir, sin dejar a nadie sin su sustento para sus hijos, que es quizá la preocupación de todos, hoy en día”.
Y para esto, “habrá que valorar cómo están finalmente las finanzas y cómo queda la negociación del FEES, que está en este momento en debate, pero sobre todo creo yo que tenemos el conocimiento y que sabemos cómo gestionar la Universidad”, manifestó.
Vargas aseguró que “la universidad pública tiene una misión de conjunto, y es colaborar con el desarrollo del país; y en las regiones ese tema es todavía más importante porque se tiene menos recursos”.
“Tenemos un desafío de poder ofertar a los estudiantes: carreras, profesiones, pero sobre todo cultura y conocimiento que estén acorde al siglo XXI”, afirmó el candidato a rector.
Vargas recalcó que “tenemos un tipo de estudiante muy especial en la UNA, más de un 80% de estudiantes que provienen de colegios públicos, y más de un 60% de los estudiantes son becados; en eso compartiría, si este servidor fuera rector, esa característica”.
“Yo sé lo que significa estudiar en la universidad en una condición particularmente difícil; y en este entorno donde la familia además está siendo apretada por la situación de la crisis económica, es un tema fundamental”, exclamó Vargas, mostrando su preocupación.
Como parte de sus objetivos, explicó que “tenemos que atender las necesidades de becas, de residencias estudiantiles, de atención al tema tecnológico, para que puedan seguir estando en la Universidad; y ese va a ser un sello de la futura administración, de quedar electo Inés Revuelta y este servidor, Leiner Vargas, como rector y rectora adjunta”.
Ya que asegura que “para nosotros es vital que nuestros estudiantes, y sobre todo aquellos que vienen de regiones y de familias donde somos la única opción, de que sigan teniendo la oportunidad de estar en la universidad”.
“La universidad, el estudio y el conocimiento, es lo único que nos puede generar movilidad social en este país”, concluyó.