Redacción, 8 jun (elmundo.cr) – La Junta de Protección Social (JPS) entregó hoy equipos e insumos valorados en 72 millones de colones al INCIENSA, que le permitirán detectar más rápido enfermedades como el Papalomoyo y la Leptospirosis.
El donativo lo recibió la viceministra de salud, María Esther Anchía, quien a su vez preside el Consejo Técnico del INCIENSA.
De acuerdo con la Ley de la Junta de Protección Social, entre un 8% y 9% de sus utilidades netas deben distribuirse entre asociaciones, fundaciones u otras organizaciones cuyos fines estén dirigidos al bienestar y el fortalecimiento de instituciones públicas de asistencia médica.
“Invertir en salud es la mejor forma de asegurar que la lotería estatal beneficie a todos los habitantes. El año pasado, gracias a que las personas compran nuestras loterías logramos invertir más de 12.021 millones de colones en hospitales, clínicas, EBAIS, programas de vacunación y prevención así como en diagnóstico e investigación en salud”, dijo Delia Villalobos, Presidenta de la JPS.
Algunos de los artículos donados son un congelador de ultra baja temperatura, dos equipos para realizar la prueba Reacción en Cadena de la Polimerasa (PCR) en tiempo real, una cámara de flujo laminar o cámara para PCR, reactivos para pruebas PCR, un microscopio invertido, una microcentrífuga, un sistema de documentación de geles, un cuantificador de ADN biofotómetro, una cámara de electroforesis y kits para extracción de ADN, entre otros.
“Con esta donación, sin duda, se fortalecen los mecanismos empleados para el control y prevención de las enfermedades, ya que se requiere reemplazar equipos periódicamente para trabajar, en todo momento, con la última tecnología, y ofrecer siempre a las autoridades y profesionales de la salud resultados de laboratorio: confiables, exactos y oportunos”, dijo la Directora General de INCIENSA, Lissette Navas.
A partir de ahora gracias a la disponibilidad de dos nuevos equipos para aplicar la prueba Reacción en Cadena de la Polimerasa (PCR) en tiempo real, los resultados de las pruebas sospechosas por Leptospirosis y Leishmaniosis se realizarán en menos tiempo.
En el caso de la Leptospirosis, en pacientes que tienen menos de 5 días, con los síntomas iniciales de esta enfermedad (fiebre y dolores en músculos y articulaciones) pueden estar listos en 5 horas, mínimo; y antes se tardaba 2 días.
La leptospirosis, enfermedad causada precisamente por la bacteria Leptospira, si bien no afecta un alto número de personas como si sucede, por ejemplo, con el dengue, es de alta mortalidad, por eso “es de vital importancia, hacer un diagnóstico oportuno, sobre todo considerando que es tratable con antibióticos”.
Mediante la vigilancia de esta enfermedad que lleva a cabo el INCIENSA, a la fecha 3 nuevas serovariedades autóctonas se han identificado en el país, a las cuales se les dio el nombre de Arenal, Corredores y Costa Rica, y éstas ya se incorporaron en el árbol genealógico mundial de la Leptospira.
Esta bacteria se ha identificado en todo el territorio nacional, en los últimos 5 años la mayoría de las pruebas positivas, detectadas en INCIENSA, provenían de la Región Brunca, principalmente del cantón de Pérez Zeledón, de las otras regiones del país, San Carlos es uno de los cantones con más casos. Los grupos más afectados son los trabajadores agropecuarios y los que practican actividades recreativas acuáticas.
La transmisión de esta bacteria al ser humano se produce por contacto directo con orina de animales infectados como: ratas, ratones y ganado, o indirectamente por el contacto con el agua de pozas, ríos o lagos, contaminadas con orina de los animales anteriormente.
Los tiempos para conocer los resultados de las pruebas sospechosas por Leishmaniosis, enfermedad conocida popularmente como papalomoyo, también serán más cortos, explicó por su parte la Dra. Nidia Calvo, coordinadora del CNR Parasitología donde se usará el otro equipo para realizar la prueba de PCR, en tiempo real.
La vigilancia basada en laboratorio, permitirá contar con resultados confiables sobre el comportamiento de la Leishmaniosis en el país; “evidencia científica esencial para definir las estrategias de atención que requiere este padecimiento y así sacarla del olvido”, explicó la Dra. Calvo
La Leishmaniosis se encuentra dentro de las enfermedades desatendidas, llamadas de esa manera porque no están dentro de las prioridades de atención, pese a ser un problema de salud pública. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), existen 17 y más de 100 millones de personas en América, sufre al menos una de estas enfermedades. Los pobladores más pobres de regiones rurales aisladas, suelen ser los más afectados.
De acuerdo con el reporte de Vigilancia de la Salud, del Ministerio de Salud, correspondiente al año 2014, en Costa Rica hay casos de todas las provincias, sin embargo las más afectadas son Limón, con 904, la mayoría del cantón de Talamanca con 285 casos, seguido de Siquirres con 201 casos. En segundo lugar se encuentra Cartago con 383 casos, donde solo Turrialba reporta 352.
Esta donación de la JPS permite contar con equipos de tecnología de punta para vigilar enfermedades de alta mortalidad y las desatendidas lo que beneficia a los sectores más desposeídos, principalmente, destacaron las especialistas del INCIENSA, quienes a su vez agradecieron otros aportes de la Junta realizados en años anteriores para fines similares.