Redacción, 15 dic (elmundo.cr)- Los investigadores Joan Martí, del Instituto de Ciencias de la Tierra Jaume Amera del CSIC (ICTJA-CSIC) y Fernando Molina, del Centro de Recursos Geotérmicos del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), han elaborado un estudio para explotar de forma eficiente y sostenible el potencial energético del campo geotermal de Borinquen.
La investigación, que forma parte de la tesis doctoral de Fernando Molina, ha sido publicada en la revista Renewable Energy.
Para elaborar el plan de desarrollo inicial, Martí y Molina recopilaron todos los datos geológicos y geofísicos disponibles sobre la zona, situada en la Caldera de Cañas Dulces.
Con toda esta información crearon un modelo conceptual del reservorio geotérmico en el cual se explica desde su génesis hasta el potencial energético calculado. El modelo obtenido muestra también la localización del reservorio y sus dimensiones, así como sus límites estructurales.
“Nuestro estudio determina con precisión la localización y el potencial energético del reservorio geotérmico, con lo que podemos dar las indicaciones precisas sobre la ubicación más adecuada de los pozos de explotación” explica Martí.
Añade que el estudio permite “rebajar los costes, ser mucho más eficientes en la explotación del campo y garantizarla por un período de 30 años”.
El establece que el campo tenga un total de 7 pozos de producción, de los cuales 5 tendrían que ser perforados y 2 se aprovecharían de los ya existentes en la actualidad.
Para seleccionar las zonas más favorables, se han tenido en cuenta cuestiones de carácter topográfico, logístico y medioambiental.
Los autores del estudio recomiendan también que el proyecto final disponga de un total de 7 pozos de reinyección de los fluidos y se construyan dos plataformas nuevas de perforación direccional para reducir los costes y el impacto sobre el medio.
Con toda esta información fueron capaces de definir y delimitar una área con una extensión de 7.31 km2 para ser usada como polo central de producción.
Según detalla el estudio en sus conclusiones, el potencial energético de la zona de Borinquen es suficiente para instalar una unidad de producción con una capacidad de 50Mwe durante 30 años.
Se prevé que la construcción del Campo Geotérmico de Borinquen se inicie durante el primer semestre del 2018.
“Aún queda mucho para explotar el total de la energía geotérmica disponible calculada para Costa Rica. De momento, solo el 13% de la energía que se genera en el país es de este origen, aunque se espera que este porcentaje sea del 20% hacia el año 2035”, agrega Martí.
Costa Rica tiene en la actualidad dos campos geotérmicos en explotación: el de Miravalles (163.5 MWe) y Pailas (41.6 MWe), lugar en el cual se está construyendo desde el año 2014 una segunda unidad de producción.
El campo geotermal de Borinquen está situado en el sector occidental de la Caldera de Cañas Dulces, ubicada en la sierra de Guanacuaste y que se formó formada hace 1.4 millones de años en el transcurso de una gran erupción.
La actividad volcánica en este punto no se detuvo y se generó en el interior de la caldera un nuevo complejo formado por los volcanes del Rincón de la Vieja y Santa María. “