San José, 3 mar (elmundo.cr)- La investigación contra los diputados Otto Guevara Guth y Víctor Morales Zapata, por un supuesto tráfico de influencias a favor del importador del cemento chino, Juan Carlos Bolaños, aún se encuentran en etapa preparatoria, según informó la Fiscalía General de la República.
La oficina de prensa del Ministerio Público dio a conocer que la causa N°. 15-00022-0033-PE contra los dos legisladores, se encuentra en proceso de recolección y análisis de pruebas, tras los allanamientos del pasado 29 de noviembre.
El año pasado, la Fiscalía les decomisó los teléfonos celulares a ambos congresistas, para buscar pruebas que ayuden a esclarecer su posible participación en el caso del cemento chino.
Los allanamientos fueron liderados por la Fiscal General, Emilia Navas, junto con otros siete fiscales, cinco magistrados suplentes de la Sala III y agentes de la Sección de Fraudes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
Las inspecciones se llevaron a cabo durante la mañana de ese miércoles, en los despachos legislativos de Morales y Guevara, así como en una oficina de asesores del libertario. También, agentes del OIJ custodiaron las viviendas y los vehículos en aras de encontrar más pruebas.
Ambos están envueltos en una investigación por su relación con Bolaños, quien actualmente se encuentra preso a raíz de un supuesto peculado en el manejo del financiamiento que el Banco de Costa Rica le otorgó a una de sus compañías, Sinocem Costa Rica.
En el caso de Morales, se le vincula con el presunto hecho de haber llamado al director de la Comisión Nacional de Emergencias, Iván Brenes, para que intercediera en un pago a favor de una de las compañías del empresario.
Aunado a ello, al diputado se le atribuye el aparente hecho de que el director de varias de las empresas de Bolaños le habría gestionado unas vacaciones de fin de año en Guanacaste.
En octubre pasado, el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Carlos Chinchilla, solicitó al Tribunal de Inspección Judicial investigar si el Ministerio Público indujo a error a los magistrados de la Sala III, tras pedir la desestimación contra los dos diputados.
La Fiscalía al parecer no encontró pruebas de que los legisladores intercedieran a favor del empresario, para que el gobierno reformara el reglamento que impedía el ingreso del cemento a Costa Rica. Por ese motivo, la Sala habría tomado la decisión de desestimar el caso.
En aquel entonces, la fiscal subrogante, Berenice Smith, dijo que aparentemente no se pudo comprobar contactos telefónicos entre Morales y Guevara con el importador del cemento chino.
Pese a ello, el 2 de octubre anterior la versión de Smith fue desmentida por el director del OIJ, Walter Espinoza, quien confirmó que “la relación telefónica sí existió”, e incluso hizo un recuento de más de 700 llamadas.
El Ministerio Público reabrió la investigación contra Morales y Guevara, luego de que la Sala de Casación Penal acogiera la petición del fiscal general al ingresar “nueva prueba” sobre el caso.
Ante la Comisión Especial que Investiga los Créditos Bancarios, Guevara manifestó que su relación de amistad de siete años con Bolaños, no estaría relacionada con la lucha que emprendió, desde el 2009, por abrir el mercado del cemento.
En ese mismo foro legislativo, Morales Zapata, quien se declaró diputado independiente, fue enfático en señalar que “todas” sus actuaciones habrían sido correctas y en el marco de la legalidad.
“La lealtad tiene límites y ante los insultos, los ataques y las acusaciones que se me han hecho, debo manifestar: No he sido el embajador de Juan Carlos Bolaños y rechazo las mentiras del señor de la DIS (Mariano Figueres), tampoco soy el poder sobre dimensionado que en palabras de algunos me quieren constituir como la Roma, donde llegan todos los caminos”, concluyó.
