Cartago, 02 ago (elmundo.cr) – La Iglesia Católica, señaló la necesidad de reconocer la objeción de conciencia como un derecho fundamental dentro de una sociedad plural con distintas percepciones éticas.
Así lo manifestó la Iglesia en la Homilía de la misa en honor a la Virgen de los Ángeles, que se realizó este 2 de agosto en la plazoleta de la Basílica.
Por su parte Bartolomé Buicues, Obispo de Alajuela, destacó que “abandonamos la responsabilidad de educar a nuestros hijos, evitando corregirlos para no traumarlos, les instruimos en sus derechos pero no en sus deberes, se anula todo lo que suene a disciplina, descuidamos la sana educación sexual, como educación para el amor, favoreciendo la anarquía de los instintos”.
“Con el falso pretexto de evitar discriminaciones, negamos la base biológica en la realidad sexuada, cediendo a los clichés antojadizos de las corrientes sociales”, afirmó.
Para la Iglesia “el Estado debe promover políticas que protejan a la familia y garantizar el derecho de los padres a elegir la educación de sus hijos, de acuerdo con sus convicciones”.
De igual forma hicieron hincapié en que “nos encontramos sin duda en una emergencia educativa, acentuada por la pandemia que todavía vivimos, es urgente remediar la deserción escolar, un gran esfuerzo por subsanar las lagunas, reforzando la evaluación, con planes de nivelación y aceleración de aprendizajes, fortalecer la equidad en la calidad de la educación con atención especial a los más pobres, reducir la brecha digital y de recursos educativos, que deja muchos en desventaja, resolver urgentemente el problema de infraestructura en los centros educativos”.
“Elevemos juntos el tono de la ética pública, combatiendo la escandalosa desigualdad y la corrupción en todas sus manifestaciones”, pronunciaron.
“En una sociedad plural con distintas percepciones éticas, es necesario reconocer la objeción de conciencia como un derecho, frente a cualquier tentativa de imposición”, reiteraron.
La iglesia insistió en preservar “las instituciones globales y las agrupaciones multilaterales que pueden trabajar por el respeto a la legalidad internacional, la cooperación para el desarrollo y La Paz”.
“Sólo la solidaridad nos permitirá una evolución positiva”, concluyó.
