San José, 23 set (elmundo.cr) – El Gobierno de la República mantiene su tesis de que los helicópteros militares de los Estados Unidos que aterrizaron en nuestro país durante el fin de semana, no necesitaban el aval del Congreso por tratarse de naves no artilladas.
El Presidente de la República, Luis Guillermo Solís solicitó un informe al Ministerio de Seguridad Pública sobre lo ocurrido el fin de semana con dichas aeronaves, para esclarecer si en efecto, las mismas no necesitaban el permiso de los diputados.
El Ministerio de Seguridad Pública dijo a EL MUNDO el día en que se reportó el vuelo de las aeronaves, que las mismas tenían como propósito repostar en nuestro país y luego seguir hacia una misión humanitaria en Panamá. Hoy, al consultarle sobre la tesis que estaba manejando este ministerio, el encargado de prensa de dicha institución, Carlos Hidalgo dijo que no podía referirse al tema hasta que no se entregara la información al Mandatario.
Diferente fue con el Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto. Melissa Durán, directora de Comunicación Institucional afirmó que los helicópteros aterrizaron según el tratado marítimo bilateral firmado entre el Ministerio de Seguridad Pública y la Embajada de los Estados Unidos.
Durán agregó que dicho tratado establece que las naves de los Estados Unidos, en caso de tener alguna necesidad como abastecerse de combustible u otra similar, pueden hacerlo y aterrizar en suelo nacional, previa comunicación a la Cancillería, que remitiría el caso a Aviación Civil, quien fue en última instancia la que dio el aval.
“Cancillería interviene meramente en recibir la solicitud de Estados Unidos. La recibimos, se envió a Aviación Civil y ellos otorgan el permiso o no lo otorgan. Nada más somos intermediarios”, declaró la funcionaria.
El Estado costarricense fue condenado por la Sala Constitucional en el año 2013, luego de que aeronaves militares artilladas de los Estados Unidos, sobrevolaran suelo nacional sin la autorización previa de la Asamblea Legislativa.
Cancillería agregó que para la cumbre de la CELAC el año anterior, también llegaron helicópteros militares, no artillados, utilizados por los mandatarios y cancilleres para llegar y partir del territorio nacional. En dicha ocasión, tampoco fue requerida la autorización de los diputados.
En conferencia de prensa ayer, Manuel González, canciller de la República afirmó que no entendía el por qué el hecho llamaba tanto la atención.
“Estados Unidos lo comunica a la Cancillería y la Cancillería a Aviación Civil, pero pueden ser esos helicópteros de Estados Unidos o el avión privado de un jefe de Estado. No son helicópteros artillados de guerra ni tienen morteros ni cosas parecidas. Es algo normal, sobre lo que están queriendo hacer un poco de bulla”, declaró.
Los helicópteros militares en cuestión fueron observados en la frontera con Nicaragua, Limón y Liberia, lugar donde recargaron combustible para dirigirse hacia Panamá.
Los diputados del Frente Amplio exigieron la cabeza de la persona que autorizó el aterrizaje de las aeronaves, ya que consideran que debieron consultarles antes del hecho. Tesis similar la maneja el oficialista Ottón Solís Fallas, quien solicitó se esclarezca la situación.