ANÁLISIS
Por Ernesto Ramírez (dpa)
San José, 7 abr (dpa) – Un borrador de proyecto inicialmente dirigido a regular y “democratizar” el espectro radioeléctrico de Costa Rica desató hoy una encendida polémica e hizo disparar las alarmas de sectores vinculados a la prensa por incluir sanciones administrativas que, sostienen las voces críticas, facultarían al Estado a clausurar emisoras y estaciones de televisión.
El documento, promovido por el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Telecomunicaciones (MICITT), coloca a los medios electrónicos independientes bajo el ojo censor del gobierno y contempla fuertes sanciones por la difusión de informaciones “falsas” o el uso de lenguaje “vulgar”, “contrario a las buenas costumbres” o “injurioso”, entre otros señalamientos.
La iniciativa, que es debatida por organizaciones sociales, empresariales y similares y luego será remitida a conocimiento de la Asamblea Legislativa, desató una marejada de críticas y reacciones en el país.
El diputado oficialista y fundador del partido en el gobierno Acción Ciudadana, Ottón Solís, calificó el documento como un “adefesio”, y advirtió que de aprobarse tal como está formulado “llevaría al Chile de Pinochet y a la Venezuela de (Nicolás) Maduro”.
Al desatarse la polémica, la ministra del MICITT, Gisela Kopper, tomó distancia este martes del documento y prometió que habrá una nueva versión, en el que se excluirán los capítulos que dieron origen a las protestas y críticas.
“Nosotros no pretendemos cerrar medios, y más bien tratamos de fortalecer la libertad de expresión”, aseguró la ministra a una emisora local.
Aparentemente, el proyecto no es conocido en su totalidad por el presidente Luis Guillermo Solís, según se desprende de las declaraciones de la ministra Kopper.
La iniciativa afloró a la luz pública poco después de que el mandatario lanzara una fuerte crítica a algunos medios de comunicación, a los que acusó de publicar presuntas informaciones tergiversadas o tendenciosas en contra de su gestión, que arrancó el pasado 8 de mayo.
“Me preocupa el fondo del borrador”, especialmente por contemplar el control sobre contenidos en los medios electrónicos, dijo el legislador Solís.
“La intención es que haya de manera más consensuada una ley que venga a regular las frecuencias radioeléctricas y los cánones, y no limitar la libertad de expresión”, respondió Kopper.
“Es un borrador, no tiene nada que ver con ningua ley de Venezuela y Chile. Lo hemos puesto a discusión de diversos sectores”, añadió.
No obstante, Solís advirtió que tal como está planteado, el documento es una “atrocidad”, y dijo preferir una prensa “equivocada” a una “censurada”.
La iniciatva fue redactada por el viceministerio de Telecomunicaciones, a cargo del viceministro Allan Ruiz, quien dijo al diario local “La Nación” que se trata de un “punto de partida” para abrir una discusión nacional que incluiría la libertad de expresión.
“Con este texto, el gobierno se está metiendo en un terreno muy peligroso, en el tema de la libertad de expresión. No queremos en Costa Rica el modelo de otros países donde la prensa ha sido acallada y amordazada”, alertó el diputado Fabrizio Alvarado, de un partido minoritario de oposición y también periodista.
Por su parte, el legislador Otto Guevara, del partido Movimiento Libertario, agrupación ubicada en la centro-derecha, calificó la iniciativa como una “chambonada” del viceministerio de Telecomunicaciones.
“Una prensa libre es el mejor control que tiene la ciudadanía contra los abusos de quienes nos gobiernan”, comentó.
El “borrador” encendió las luces de alerta en la Defensoría de los Habitantes. “Ya la defensoría había alertado que ningún proyecto de ley debe abrir portillos para el control de contenidos”, dijo la Defensora y periodista, Monserrat Solano.
Por su parte, el diputado Rolando González, del Partido Liberación Nacional, principal fuerza de oposición del país, calificó la iniciativa gubernamental como “un atentado contra la esencia de la democracia costarricense”.
“Contiene aberraciones jurídicas, antidemocráticas, contra ser costarricense”, advirtió.
