San José, 12 ene (elmundo.cr) – Este viernes el jefe de fracción de Nueva República, Fabricio Alvarado, informó que hace un año el Juzgado Penal del Segundo Circuito Judicial de San José dictó sobreseimiento definitivo por el famoso caso de las bolsas negras con dinero y la estructura paralela por la que fue acusado en la campaña de 2018.
El 24 de noviembre de 2022, la Fiscalía Adjunta de Probidad y Anticorrupción solicitó al Juzgado Penal del II Circuito Judicial el sobreseimiento definitivo, posteriormente el Juzgado Penal del Segundo Circuito Judicial de San José dictó sobreseimiento definitivo el 13 de enero de 2023.
Ante esto, Alvarado explicó que “en un extenso documento de casi 70 páginas, la Fiscalía expone y derrumba cada uno de los argumentos falaces y malintencionados de quienes denunciaron en mi contra, en contra de Jonathan Picado, de Luis Alonso Naranjo, de Juan Carlos Campos y otras personas”.
“La Fiscalía, en la solicitud de sobreseimiento definitivo, considera que no existe prueba suficiente de la ocurrencia de los hechos denunciados y la mayoría de estos no revisten los elementos para ser siquiera considerados típicos y menos para pensar en una acusación. En el documento se evidencia que tanto la Fiscalía como el Tribunal de Elecciones realizaron una investigación amplia, con entrevistas tanto a la parte acusada como a la acusadora. Hicieron una recolección de abundante prueba documental, con lo que llegan a la conclusión de que no se cometió ningún acto indebido”, aseguró.
Alvarado indicó que “nos señalaron por, según ellos, recibir bolsas negras con dinero en efectivo durante la campaña 2018. Nos acusaban de crear una estructura paralela de financiamiento. La Nación nos dedicó 12 portadas y reportajes de páginas enteras, a veces de dos páginas, 21 páginas en total, motivadas por un odio personal, y dicho sea de paso poco profesional, de parte de su director Armando González y de algunos de sus pseudoperiodistas“.
“Señores de La Nación, los costarricenses ya no creen en ustedes, en sus mentiras, en su forma errática y antiética de hacer periodismo. La amenaza contra su medio no proviene del Gobierno o de una agrupación política. Ustedes, como medio, terminarán desapareciendo si no cambian esa forma, porque ya nadie les cree y los culpables de esa pérdida de credibilidad han sido ustedes mismos, con sus repetidas falacias, todo con el afán de sostener sus ideologías e intereses políticos”, manifestó Alvarado.