San José, 21 nov (elmundo.cr) – Ante las recientes manifestaciones de figuras políticas extranjeras que cuestionan los procedimientos constitucionales y decisiones de las autoridades electorales de Costa Rica, expresidentes de la República han alzado su voz en defensa de la democracia del país.
En un comunicado emitido el 21 de noviembre de 2025, los exmandatarios, electos democráticamente por tres diferentes partidos políticos y que gobernaron desde 1986 hasta 2022, aclararon su postura sobre la situación.
Los expresidentes resaltaron que la Constitución Política de Costa Rica establece la imparcialidad absoluta de las autoridades de gobierno en el proceso electoral. Enfatizaron que, para los más altos cargos, incluyendo al presidente de la República y sus ministros, su participación electoral se limita al voto secreto el día de las elecciones, según el artículo 95 inciso 3 constitucional y 146 del Código Electoral.
Los exgobernantes señalaron que esta limitación, que impide incluso la afiliación a un partido político, es una garantía de la libertad electoral de los ciudadanos, con 98 años de tradición en el ordenamiento jurídico costarricense. “Nos ha sido aplicada a todos los que hemos gobernado este país, sin excepción”, afirmaron.
Asimismo, recordaron que el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), con “el rango e independencia de los Poderes del Estado” (Artículo 9 Constitución Política), es la entidad encargada de conducir el proceso electoral. El TSE tiene la facultad de “interpretar en forma exclusiva y obligatoria las disposiciones constitucionales y legales referentes a la materia electoral” (Artículo 102 Constitución Política).
Los exmandatarios mencionaron que ante denuncias por violación al precepto de beligerancia política contra el actual presidente de la República, el TSE solicitó al Poder Legislativo levantar el fuero de inmunidad para iniciar una investigación, conforme al artículo 270 del Código Electoral. Este procedimiento incluye garantías rigurosas, como la posibilidad de descargo por parte del presidente y una votación calificada.
Finalmente, los expresidentes destacaron que Costa Rica es la democracia más antigua e ininterrumpida de América Latina y una de las pocas democracias plenas del mundo. Resaltaron el reconocimiento internacional a la solidez, independencia y profesionalismo de sus instituciones electorales, avalado por los informes de las misiones de observación electoral de la Organización de Estados Americanos (OEA) desde 1962.
Hicieron un llamado a la comunidad internacional a no emitir juicios precipitados basados en versiones tendenciosas sobre las autoridades electorales, advirtiendo que las tensiones políticas en el contexto electoral pueden ser aprovechadas por actores locales para desprestigiar el proceso.
