San José, 20 set (elmundo.cr) – Secuestrada una sede y bloqueos en calles con presas kilométricas en otra. Grupos de estudiantes de la Universidad de Costa Rica de las sedes de San Pedro de Montes de Oca, en San José y la de Occidente, en San Ramón de Alajuela, generan caos y violencia en este momento, como medidas de protesta por la negociación del Fondo Especial para la Educación Superior (FEES).
En la sede de Occidente, la situación llegó al punto de que los estudiantes se tomaron la Dirección de ese centro universitario, en un zafarrancho que inició a eso de las cinco de la tarde, según dijo a EL MUNDO, Roxana Salazar, directora de la casa de estudios.
“Ellos (los estudiantes) están allí. Entraron a eso de las 5 de la tarde, entraron de manera agresiva y tomaron la coordinación de Docencia y aparentemente revolcaron documentos importantes. La secretaria se devolvió para traer su pasaporte y un dinero, y aparentemente se llevaron el dinero, pero la empujaron y la agredieron. Estamos esperando a ver qué protocolo aplicamos. Me piden que vaya, pero la Seguridad de la Universidad me aconseja que espere hasta que los oficiales hablen con ellos para hacerlos entrar en razón de que lo que hacen es un delito”, dijo a este medio Salazar.
Uno de los estudiantes cabeza de la organización denominada “Asamblea Autónoma” conversó con El MUNDO a cuenta de no revelar su identidad, y confirmó que se mantendrán en las instalaciones de la Universidad hasta no definir el mensaje y la vocería.
“Llámenos en unos 40 minutos para valorar si hablamos o no con su medio”, dijo el estudiante, quien recalcó que no podría dar declaraciones hasta no tener una posición aprobada por la organización de protesta, aunque pidió que se sumaran más grupos en apoyo a su medida de presión.
Por su parte, Salazar recalcó que están dispuestos a conversar con los estudiantes, siempre y cuando comprendan que la toma de la sede de Occidente implica acciones delictivas, sin embargo, enfatizó en que comprende el espíritu “revolucionario” que mueve a los estudiantes.
“Estoy en disposición de hablar con ellos, no entiendo sus demandas, si nosotros somos de los mismos. Sabemos que debemos luchar por un presupuesto justo (para la Universidad). Yo he querido acercarme a ellos, hacerlos razonar, pero son muy irrespetuosos, les he dado la oportunidad de hablar, y no entiendo que es lo que quieren, pues entendemos que debemos luchar por un presupuesto justo, pero no entorpecer la acción de la Universidad”, afirmó.
La directora recalcó que no permitirán que les arrebaten el control de las instalaciones, y que si no entran en razón: “aplicaríamos otras medidas, no podemos permitir que ellos entorpezcan la academia, atemoricen a los funcionarios y causen pánico y caos”, dijo.
En tanto, la situación en las cercanías del campus de San Pedro de Montes de Oca no es mucho mejor. Los estudiantes se encuentran enfrascados en discusiones con oficiales de Fuerza Pública que intentan persuadirles de liberar la vía ante las presas que están ocasionando con sus protestas.
Esta calle en particular, la que pasa al costado sur del Parque John F. Kennedy, es una de las principales rutas para conectar el centro de San José con Curridabat, Tres Ríos y Cartago, por lo que el caos vial está atrapando a cientos de condcutores.
Las molestias de los estudiantes han venido en escalada desde hace un par de semanas, cuando se dio a conocer que el presupuesto para las universidades públicas para el próximo año.
Las cinco universidades públicas recibirán un aumento del 3,7% en su presupuesto para el año 2018, según acordó la Comisión de Enlace, integrada por representantes del Gobierno y las universidades estatales.
En total, el monto del Fondo Especial para la Educación Superior (FEES) para el 2018 será de ¢496.266 millones, y la transferencia a la Universidad Técnica Nacional será de ¢33.800 millones.
Aún así, el plan de inversión, aprobado por el Consejo Nacional de Rectores (Conare), es inaceptable, pues incumple con el 8% del Producto Interno Bruto (PIB), de allí que la marcha llevara por lema “La educación no se negocia”.
Además, insisten que no es su culpa la crisis fiscal por la que atraviesa el país y que para garantizar una educación de calidad es fundamental que se les incremente el presupuesto y que se cumpla con el mandato constitucional.
Bajo este panorama, las autoridades universitarias siguen en las valoraciones sobre las acciones a tomar, sobre todo en la sede de Occidente, donde las instalaciones no están bajo el control de la seguridad de la Institución. Colaboró con esta información Kristin Hidalgo.
