En 2013 tanto Estados Unidos como Alemania desplazaron dos baterías de misiles al territorio de su aliado de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) con el objetivo de evitar ataques lanzados desde Siria hacia Turquía. España aportó una quinta batería.
Antes de que el sistema fuese desplazado a territorio turco se habían producido ataques esporádicos entre las filas turcas y las fuerzas sirias.
Si bien los misiles estadounidenses serán retirados, podrían volver a desplazarse hasta la frontera turco-siria “en el lapso de una semana”, precisó el comunicado conjunto de los gobiernos norteamericano y turco.
Por otra parte, el comunicado indicó que las embarcaciones de la Marina estadounidense permanecerán en el este del Mediterráneo.
Alemania también anunció este sábado que retiraría su sistema Patriot de la misma zona, así como a 250 soldados. En este caso el mandato concluye a fines de enero.
Según el Ministerio de Defensa alemán, la decisión fue tomada debido a que el grado de amenaza de ataques de misil procedentes de Siria disminuyó notoriamente.
