San José, 1 mar (elmundo.cr) – Dentro de un año los miembros del Poder Ejecutivo que tengan aspiraciones presidenciales para el 2026 deben renunciar a su puesto dentro del gobierno.
La fecha exacta para que cualquier jerarca de la Administración Chaves Robles, que quiera ser candidato a la Presidencia de la República, renuncie será el 1 de febrero de 2025.
Así las cosas, ya empiezan a sonar nombres con insistencia para ser el “designado” por Rodrigo Chaves para representar al oficialismo.
Aunque aún no es claro cuál sería el partido político que represente al “chavismo”, si son casi evidentes cuales serían los posibles aspirantes.
Chaves buscaría para darle su bendición a una figura que le sea sobre todo leal, que le permita como expresidente tener una presencia directa y protagónica en el siguiente gobierno. Es claro que este aspirante será del círculo más cercano al mandatario.
En este círculo de la confianza del presidente se puede ubicar a Luis Amador, el jerarca del MOPT ha sonado con mucha insistencia en los últimos meses, he incluso él lo ha dicho en un par de oportunidades públicamente. Aunque es un prospecto interesante para el presidente una “disputa de egos” podría estar afectando la bendición al ministro Amador.
Luis Amador cuenta con la ventaja de la exposición mediática propia de su puesto, aunque esto también le puede jugar en contra si se excede en buscar protagonismo, porque aquí es donde chocaría de frente con el presidente Chaves.
Otro nombre muy interesante en la carpeta de Chaves es la ministra de Planificación, Laura Fernández, una figura que sería más leal y de mayor confianza del presidente, además el ser mujer le daría un equilibrio interesante para que el “chavismo” logre un segundo periodo.
Fernández ha tenido un papel efectivo en su gestión, sin ser sobreexpuesta, es una mujer inteligente, que sabe escuchar y es del agrado de sectores diferentes a los del presidente Chaves.
La valoración de que Laura Fernández sea la candidata del oficialismo, también va en el sentido de incluir dos vicepresidentes que la refuercen en lo económico y lo social, sin descartar que este último venga de la actual Asamblea Legislativa, donde Paola Nájera es alguien que el presidente ve con buenos ojos.
La presidenta de la CCSS, Marta Esquivel, es otra de las personas que cuentan con la confianza del presidente Chaves, aunque sus acciones han bajado mucho en los últimos meses, por la fuerte exposición de su puesto, aunque sigue contando con todo el apoyo del mandatario.
Las opciones de Esquivel van mucho de la mano de lo que refleje el apoyo popular respecto a su figura.
Por último, se menciona también al actual presidente del AyA, Juan Manuel Quesada, una figura joven que goza de toda la confianza del presidente.
Quesada tuvo un buen paso por Recope, pero ahora su puesto es más complicado, por la reconocida ineficiencia de Acueductos y Alcantarillados. Esta podría ser una plataforma muy importante para el jerarca si logra desenredar todos los nudos gordianos que tienen paralizada la institución.
Por último no se debe dejar de lado lo que haga la ministra de la Presidencia, Natalia Díaz, que tiene su propio partido y que si no cuenta con el apoyo presidencial igual aspiraría en el 2026 bajo su bandera de Unidos Podemos, sobre todo después del éxito de la agrupación en las elecciones municipales.