Dolanescu denuncia que exposición fotográfica del TEC es un irrespeto a la sensibilidad religiosa de los católicos

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Obra "El abrazo" de la exposición "La oscuridad de la luz" de Paul Garnier.

San José, 28 sep (elmundo.cr) – El exdiputado Dragos Dolanescu denunció que la exposición fotográfica del TEC es un irrespeto a la sensibilidad religiosa de los católicos.

Se trata de la exposición de La oscuridad de la luz de Paul Garnier, que inauguró este 24 de setiembre en el vestíbulo del Centro de las Artes, en el Campus Tecnológico Central Cartago.

Según el artista lo que busca es exponer las contradicciones entre el discurso de la Iglesia Católica y las acciones de los sacerdotes sobre el tema del abuso sexual.

“Es fácil predicar y es igual de fácil ignorar y tratar de encubrir las faltas que uno comete aunque vayan en contra de los principios más básicos de la iglesia”, indica la página de la exposición.

Por su parte el TEC indicó que “es una propuesta crítica pero sutil y respetuosa que hace reflexionar al espectador acerca de la problemática de la pedofilia en la Iglesia Católica”.

Ante esto, Dolanescu señaló que esta exposición “infringe los cánones del respeto a la sensibilidad religiosa de nuestra gran mayoría de fieles católicos; utiliza la imagen de un menor de edad; y generaliza la pedofilia  para un colectivo de eclesiásticos, que en su gran mayoría son personas buenas, honorables y aportan un liderazgo positivo para el país”.

“La reacción de la Iglesia Católica como institución inició tibia y timorata para tomar fuerza, al punto de ordenar la separación de cualquier eclesiástico que se le compruebe hechos de abusos sexuales contra menores”, recalcó.

Dolanescu recaló que “el Papa Francisco en su reciente viaje a Bélgica ha ofrecido disculpas a las víctimas por el comportamiento pedófilo en dicha nación de algunos sacerdotes”.

“La conducta humana de la pedofilia no sólo está presente en la Iglesia Católica, sino, lamentablemente en algunos hogares, donde las víctimas guardan silencio aterrador. También, se suman agredidos sexuales por parte de docentes, personal de la salud y otros”, manifestó.

Para el exdiputado “la exposición fotográfica a mi parecer sobrexplota el tema, dejando la sensación de una aversión a la Iglesia Católica más que una denuncia; expresando una posición ideológica y política para destruir un supuesto enemigo, bajo el sentimiento  antirreligioso del fotógrafo. En esta materia, ni tanta luz que queme al santo, ni tan poquita que no lo alumbre“.

“La ceguera fanática, producto de una ideología, oscurece las mentes y  los corazones”, aseguró.

Dolanescu insistió en que “la libertad de expresión debe tener sus límites y ejercerse con responsabilidad. En este caso no se vale difamar un colectivo de eclesiásticos desde la generalización de hechos bochornosos, delictivos y censurables, lesionando el honor de muchos”.

“En mi condición de católico, lo que consideró inadecuado son los estigmas que pueden generar para todos los sacerdotes, unas fotografías colgando en las salas del TEC; que dañan impunemente la reputación de la inmensa mayoría. Asimismo, resulta irrespetuoso la utilización de elementos simbólicos considerados sagrados para la comunidad religiosa católica costarricense”, sostuvo.