San José, 2 ene (elmundo.cr) – El diputado oficialista, Henry Mora Jiménez, pidió entre sus deseos para el nuevo año, que el presidente, Luis Guillermo Solís, “viaje poco”.
Entre su lista de siete deseos para el nuevo año el legislador del partido Acción Ciudadana (PAC), apuntó, “que el Presidente viaje poco, lo estrictamente necesario. Lo necesitamos aquí, dirigiendo la orquesta y dando el ejemplo en todo lo que haga”.
La lista completa de deseos que el legislador de gobierno publicó en su red social, Facebook, es la siguiente:
1. Que como sociedad tengamos la sabiduría y la capacidad para sortear una eventual crisis irreversible en el régimen de pensiones de la Caja, que de sobrevenir, resultaría trágica para nuestro modo de convivencia. Para este propósito, en 2017 deberán tomarse decisiones y acciones de crucial importancia, ojalá en consulta con la ciudadanía.
2. Que el actual gobierno no desmaye en su lucha por erradicar la pobreza extrema, verdadera afrenta a la dignidad nacional. Con respecto a la lucha contra la creciente desigualdad, al parecer esta seguirá aguardando por mejores tiempos.
3. Que el Presidente viaje poco, lo estrictamente necesario. Lo necesitamos aquí, dirigiendo la orquesta y dando el ejemplo en todo lo que haga.
4. Que los “vientos electorales” no terminen por estropear la disposición a dialogar y la capacidad de lograr acuerdos en la Asamblea Legislativa. Sería muy lamentable que el 2017 sea un año perdido en el Congreso, cuando aún restan importantes proyectos de ley por aprobar (nueva ley de aguas, incentivos al transporte eléctrico, bienestar animal, impuesto a personas jurídicas, entre otras).
5. Que en 2017 finalmente (después de tres gobiernos) veamos inaugurados los nuevos puentes sobre el Río Virilla (en La Uruca y el de “la platina”); iniciada la ampliación de la Ruta 32 (a Limón) y terminada la Circunvalación Norte; así como otras obras de infraestructura fundamentales, no sólo para el transporte y la vialidad; sino además, para la propia autoconfianza de un pueblo que no termina de asombrarse ante tanta incapacidad gubernamental acumulada.
6. Que nuestra doble moral ambiental entre en crisis. Porque nos ufanamos de nuestros parques nacionales pero hemos convertido en cloacas abiertas muchos de nuestros ríos; y porque ni siquiera hemos desarrollado una cultura general de separación de residuos y de reciclado a gran escala. Esta crisis sí que la necesitamos.
7. Por último, pero seguramente lo más importante, que se revigorice nuestra capacidad de convivencia pacífica, hoy altamente amenazada por la delincuencia y el crimen organizado y por la “guerra en las carreteras” que a diario vivimos.
“Son sólo siete (obviamente subjetivos) y podrían multiplicarse por 5 o por 10, pero si tuviera la capacidad de escribir tantas, nadie terminaría de leerlos”, concluyó el legislador.
