San José, 27 feb (elmundo.cr) – El Consejo Centroamericano de Procuradores y Procuradoras de Derechos Humanos ve con profunda preocupación la situación en torno a los indígenas ngobes y fue enfático en solicitar medidas claras que permitan proteger a este grupo.
Según un pronunciamiento emitido esta semana, las 14.000 personas que forman parte de los pueblos Ngäbe y Buglé se ven forzados a movilizarse desde Panamá, para realizar labores en Costa Rica como la recolección de café, corta de banano y platano.
La Defensora de los Habitantes de Costa Rica, Montserrat Solano Carboni declaró que está preocupada por la situación pues durante esta movilidad los indígenas ven vulnerados sus derechos laborales, salud y seguridad social, así como educación y justicia.
La violación al cumplimiento de sus derechos laborales y el respeto a sus culturas y cosmovisiones son la principal causa de las migraciones de los indígenas ngobes.