San José, 05 may (elmundo.cr) – Por primera vez en 40 años, Costa Rica registra deflación. Así lo reveló el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).
De acuerdo con el comunicado de prensa remitido la mañana de este martes, el Índice de Precios al Consumidor registró una deflación de un 0,16% pasando de a 170.812 a 170.679.
Asimismo, la variación acumulada de Mayo 2014 a Abril 2015 del índice general fue de 1,81%, menor que la variación de este mismo período del año anterior (3,68%).
El INEC explicó que de los 292 bienes y servicios que componen la canasta de consumo, el 52 % aumentó de precio respecto al mes anterior, un 36 % presentó disminución y el restante 12 % permaneció sin variación.
“Los grupos de consumo que más influyeron en la variación mensual de febrero del índice fue el transporte, que registró una deflación de 3.61 % por el bajo precio de la gasolina y el diésel”, explicaron los jerarcas del INEC.
Pero, ¿qué es la deflación?
En economía, la deflación es una baja generalizada y prolongada del nivel de precios de bienes y servicios que componen la canasta básica. A grandes rasgos, es lo contrario a la inflación.
En términos generales, la deflación puede considerarse positiva pues al bajar los precios de los bienes y servicios, el sueldo real de los trabajadores aumenta y por tanto, pueden comprar con la misma cantidad de dinero, mayor cantidad de bienes y servicios.
La deflación se produce cuando la oferta en una economía es superior a la demanda, por lo tanto el sector empresarial se ve obligado a reducir los precios para poder vender la producción y no verse obligado a acumular productos.
La peligrosidad de la deflación es lo difícil que es salir de ella. Este fenómeno crea un círculo vicioso porque al caer la demanda, las empresas ven reducidos sus beneficios al tener que reducir los precios para conseguir ventas, como consecuencia de ello, tienen que reducir costes, lo que significa que tienen que recortar empleados. A su vez, si hay gente que se queda sin trabajo, la demanda seguirá disminuyendo ya que estos dejarán de comprar también.
El año pasado, nuestro país acumuló una inflación del 5,1%, ligeramente por encima de la meta oficial prevista de un máximo de 5%. Para 2015 el Banco Central se propuso como meta que la inflación se ubique entre el 3% y el 5%.