San José, 6 may (elmundo.cr)- La Alianza Latinoamericana Anticontrabando (ALAC), integrada por empresas, cámaras y gobiernos de la región y que comenzará desde hoy y hasta el 8 de mayo su V Encuentro en San José, Costa Rica, buscando reforzar la legalidad comercial, informó que el principal motor del contrabando en América Latina se produce en el mercado de cigarrillos.
De acuerdo con ALAC, el contrabando mueve cerca de un 2% del PIB de América Latina, o unos U$S 150.000 millones anuales, afectando industrias como las de siderurgia, metal-mecánica y acero; tabaco, licores, medicamentos y cosméticos; plásticos y calzado; textiles y confecciones; y ciberseguridad.
La modalidad delictiva abastece mercados con productos contrabandeados, sin regulaciones ni controles, afectando a los consumidores y al fisco.
Solamente en 2018, Brasil, mayor economía del continente, perdió cerca de 50.000 millones de dólares por el mercado ilegal. “El principal motor de ese problema es el contrabando de cigarrillos, que domina 54% del mercado en Brasil, 24% del chileno y 12% del argentino”, dijo Edson Vismona, presidente del Instituto Brasileño de Ética Competitiva (ETCOS) y presidente pro-tempore de la ALAC.
Estarán presentes en los debates Carlos Escudero, Subdirector de Fiscalización, Servicio Nacional de Aduanas de Chile; Paulo Rogerio Lino, presidente del Grupo de Trabajo BASCAP Brasil; Enrique Thomas, del Ministerio de Seguridad de Argentina; Laura Valdivieso, viceministra de Comercio Exterior de Colombia; y Karolyn Salcedo, gerente Regional de Desarrollo para las Américas y el Caribe de la Organización Mundial de Aduanas; entre otros funcionarios.
Los países que integran la Alianza son Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Guatemala, Honduras, México, Panamá, Costa Rica, Paraguay, Perú, Uruguay y Venezuela.
Vismona agregó que la integración entre los países en las áreas de inteligencia, diplomacia y represión es fundamental para combatir al contrabando. Para el ejecutivo, equilibrar la carga tributaria entre los países de la región es una de las maneras más eficientes para combatir el contrabando.
La Alianza difunde estrategias efectivas y fortalece la articulación público-privada para la lucha anticontrabando, ha avanzado hasta integrar representantes de 15 países de América Latina.
De igual forma, este evento será la oportunidad para presentar los vínculos del contrabando con el lavado de activos, la falsificación de marcas y la necesidad de contar con colaboración regional para desarticular bandas criminales; este espacio servirá para dar a conocer los mecanismos más idóneos para contrarrestar el comercio ilícito.
Durante el encuentro también se tratará el comercio ilícito desde la política comercial, las medidas de defensa comercial y el operador económico autorizado y el marco SAFE como herramientas para combatir este flagelo.
El foro se creó como un evento especializado en América Latina y es un punto de referencia a nivel regional para dar a conocer las más recientes acciones gubernamentales implementadas para contrarrestar el contrabando abierto y técnico.
El delito del contrabando, por ser de carácter transnacional, convoca a la unión del sector privado y de los entes gubernamentales de toda la región a combatirlo de manera conjunta.
La apertura del evento, organizado por la Cámara de Comercio de Costa Rica (CCCR) y la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (ANDI) tendrá como sede el Hotel Intercontinental de San José, y será encabezada por la ministra de Economía de Costa Rica, Victoria Hernández; la vicepresidenta Ejecutiva de ANDI, Paola Buendía; y la presidenta de la CCCR, Yolanda Fernández.
La primera conferencia llamada “Comercio ilícito en Centroamérica: Impacto en el desarrollo económico de la región” la impartirá Melvin Enrique Redondo, de la Secretaría de Integración Económica Centroamericana (SIECA).
Se instalarán Mesas Transversales sobre contrabando abierto, contrabando técnico y funcionarios públicos, así como Mesas Sectoriales sobre cigarrillos, textiles y confecciones, bebidas, calzado, acero y combustibles.
El último estudio de Comercio Ilícito de Cigarrillos presentado en 2017 por el Observatorio de Comercio Ilícito de la Cámara Nacional de Comercio y British American Tobacco Chile, muestra los índices de consumo de este producto ilegal y sus principales consecuencias, destacando entre ellas un crecimiento exponencial de su “preferencia” entre los consumidores y un perjuicio fiscal que alcanza los US$500 millones anuales por concepto de evasión tributaria.
En Argentina, los cigarrillos de contrabando en 2017 generaron pérdidas estimadas en la recaudación tributaria por un monto aproximado de 8.500 millones de pesos.