San José, 28 nov (elmundo.cr) – El Colegio de Médicos y Cirujanos de Costa Rica expresó su profunda preocupación ante la posible renuncia masiva de un grupo significativo de médicos especialistas de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), una situación anunciada con antelación que podría afectar gravemente la atención en los centros hospitalarios, especialmente en un periodo de alta demanda como el fin y principio de año.
La institución destacó que el movimiento de los especialistas no se limita a una reivindicación salarial, sino que responde a una serie de necesidades críticas como flexibilidad horaria, acceso a insumos adecuados, capacitación y mejoras en las instalaciones hospitalarias. “Estos son aspectos clave para garantizar la atención de calidad que merece la población costarricense”, afirmó el Colegio.
Un problema previsible y evitable
El Colegio lamentó que la problemática, pese a haber sido advertida con meses de anticipación, no recibió la atención necesaria por parte de las instituciones competentes.
“La situación que se está produciendo ya había sido anunciada de manera previa y sus efectos eran previsibles y evitables”, subrayaron, haciendo un llamado a las autoridades para que adopten medidas urgentes que permitan solventar la crisis.
Propuesta: salario global para especialistas
Entre las acciones sugeridas, el Colegio instó al Poder Ejecutivo a convocar en sesiones extraordinarias el Proyecto de Ley 24.239. Esta propuesta incluye un transitorio que permitiría a los médicos especialistas con esquemas salariales compuestos migrar a un sistema de salario global. “Esta iniciativa cuenta con la dispensa de trámites por parte de los diputados, lo que facilita su discusión y eventual aprobación”, señalaron.
Salidas graduales para mitigar el impacto
Ante la posibilidad de que las renuncias se concreten, el Colegio recomendó a los hospitales coordinar con los médicos especialistas para implementar una salida gradual de los profesionales. Este enfoque busca reducir las afectaciones en los servicios de salud y en los pacientes que dependen de ellos.
“Es imprescindible actuar para garantizar la atención de la población y evitar un colapso en el sistema de salud pública”, concluyó el Colegio, reiterando su disposición a colaborar en la búsqueda de soluciones.
Esta situación evidencia la necesidad de abordar los retos estructurales del sistema de salud costarricense para prevenir crisis similares en el futuro y asegurar una atención médica de calidad para todos los ciudadanos.