Redacción, 19 oct (elmundo.cr) – Las autoridades de la Comisión Nacional de Prevención de Riesgos y Atención de Emergencias (CNE), y del Servicio Nacional de Salud Animal (SENASA), del Ministerio de Agricultura y Ganadería, desmienten que en las últimas semanas se hayan registrado muertes de animales afectados por la caída de ceniza.
Tanto las autoridades de la CNE como las de SENASA pusieron en práctica un intenso operativo para responder a los incidentes generados por la caída de ceniza del Volcán Turrialba, con una inversión que supera los 240 millones de colones.
Las autoridades de ambas instituciones hacen un llamado a la población, para que informen de inmediato sobre cualquier incidente que implique la afectación severa o la muerte de animales, al número 2587-2083, del SENASA, con el propósito de tomar las medidas pertinentes.
Además, esta institución cuenta, desde el 2006, con un Plan de Acción para mitigar el riesgo en la zona de influencia del volcán Turrialba y ha capacitado a los productores pecuarios para que tomen las medidas de mitigación ante estos eventos.
SENASA recomienda tener los animales en lugares bajo techo y refugios, lavarle con bastante agua, los ojos, boca, nariz y piel para limpiar la ceniza, preferiblemente con una bomba de espalda. Otras recomendaciones son cubrir las fuentes de agua con sarán, y si detectan olor anómalo, cambiar el agua y proporcionar agua limpia.
La CNE, en coordinación con el Ministerio de Agricultura y Ganadería, a través de SENASA, distribuyeron en las últimas semanas más de 880 sacos de pulpa deshidrata, 3710 pacas de pasto trasvala, insumos agrícolas, se contrató maquinaria y se facilitaron 109 sopladoras para limpiar la ceniza de los cultivos.
Además, se activó el Comité Asesor Técnico en Protección de Animales en Desastres, se abrió una línea de crédito para la construcción de refugios y se distribuyeron suministros en más de 50 comunidades de los cantones de Santa Cruz y Santa Rosa de Turrialba, Pacayas y Capellades de Alvarado, Santa Rosa, Potreror Cerrado y Cot de Oreamuno y varias comunidades de Moravia y Vázquez de Coronado.
Según inspecciones realizadas por SENASA, existe una acumulación de ceniza sobre el pasto de 5 mm, lo que provoca que los animales no lo ingieran o disminuyan su consumo. Esto afecta la producción de leche y la fertilidad del hato, en las 220 fincas afectadas, donde existe una población de 5,227 animales, los cuales requieren insumos de alta calidad.