San José, 5 nov (elmundo.cr) – El presidente de la República, Rodrigo Chaves, le recordó a la presidenta del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), Eugenia Zamora, y a los magistrados, que garantizar la pureza del sufragio es su trabajo, por el que el pueblo de Costa Rica les paga cifras millonarias cada mes.
Chaves comentó que “doña Eugenia, usted dice, ah, no, yo soy buena porque le dimos a usted el triunfo en las pasadas elecciones. Eso es como agradecerle a una máquina ATM, a una máquina, a un cajero automático, porque me dio la plata, que era mía ahí”.
“¿Qué iba a hacer? ¿Violar el sufragio, Doña Eugenia? No, no, yo no le estoy acusando de que usted va a violar el sufragio, yo le estoy acusando de que usted le pita las faltas de manera diferente a diferentes grupos”, sostuvo.
El mandatario recalcó que “dice usted, no se pueden quedar cruzados de brazos ante irregularidades y beligerancia, pero sí pueden quedarse ciegos, sordos, mudos ante casos que verdaderamente sí eran beligerancia e ilegales en su momento. Desde don Óscar Arias, su antiguo jefe, yo no sé si es antiguo jefe, pero exjefe formalmente, se pasó inaugurando obras, placas, poniendo placas por todo Costa Rica, soñando traspasarle la banda presidencial a una mujer. Ups, cuántas mujeres había candidateadas en ese momento. Una, la del Partido de Liberación Nacional, doña Laura Chinchilla. Y usted no hizo nada, usted ya era miembro del Tribunal”.
“Ah, pero cuando Rodrigo Chaves habla sobre otras cosas que no tienen nada que ver con política electoral, ahí sí hace usted su circo electoral y manda a sus letrados, los atoja, como dice el pueblo de Costa Rica, para que traten de morder. Pero no tienen credibilidad tampoco. Y usted sabe por qué usted hace esas cosas, magistrada, yo sé que usted sabe, pero yo se lo voy a decir al pueblo, usted hace esas cosas porque primera vez en la historia de esta patria, la Segunda República, hay un presidente que no le debe nada, ni a los Arias, ni a los banqueros, ni a la casta política, ni a los que controlan las instituciones como usted”, aseguró.
Chaves recalcó que “a usted le incomoda mucho que este servidor no sea de los que tira la piedra y esconde la mano. Yo la dejo afuera enseñando. A usted le molesta mucho que cuando yo denuncie lo haga con nombres y apellidos. Eugenia Zamora, Max Ferrón, Zetty Bou y los demás”.
“Doña Eugenia, ¿quién le dijo usted que las personas que ocupan cargos jerárquicos en las instituciones son sagradas e inmutables?”, cuestionó el presidente Chaves.
“Eugenia, mire, los ciudadanos la miran con atención. El país le está observando. Nosotros queremos y demandamos instituciones que cumplan su papel y para eso los que ocupan esas sillas actúen sin favoritismos, sin aspavientos y sin hacerse las víctimas, como hace usted. Eugenia, doña Eugenia, nosotros demandamos imparcialidad”, indicó el presidente.
