San José, 11 nov (elmundo.cr) – El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, señaló que para solucionar el problema de inseguridad que enfrenta Costa Rica toda la sociedad en su conjunto debe trabajar unida.
Bukele explicó que en El Salvador “muchas veces la policía, que siempre tuvo antes de nosotros gente noble y que quería luchar por su país, iban y agarraban 100 pandilleros presos en un día, camiones de pandilleros presos, tatuados hasta de los párpados, y se lo llevaban a la cárcel dos tres días después 99 libres y uno no salió libre porque agarró a puñetazos al guardia”.
“Era imposible salir si toda la sociedad no decidía apoyar el plan completo y el plan completo no sólo quiere decir agarrar al delincuente, sino que el delincuente se quede en la cárcel, por hacer eso alguna gente dijo están violando el derecho humano el delincuente, no, todos los delincuentes tienen derechos, no hay un solo delincuente en este mundo que no tenga derechos, porque son humanos, nadie está discutiendo eso”, aseguró.
El mandatario salvadoreño relato que “me mostraron hace unos días una señora que hace barras de chocolate, pero no tiene manos, porque sus sobrinos pandilleros le cortaron las dos manos, a su tía, porque no les pagaba la extorsión, (…) nadie defendió a la señora, nadie dijo el derecho humano a la señora, nadie la defendió”.
“Todas estas organizaciones, todos estos políticos, hoy se rasgan las vestiduras por los derechos humanos de los delincuentes, nadie dijo nada de ella”, agregó.
Bukele insistió en que “nadie decía el derecho humano de la persona que fue asesinada, que fue decapitada, de la mujer que fue violada, de los negocios que fueron extorsionados, de las personas que perdieron su propiedad, del salvadoreño que no podía salir ni siquiera”.
“Entonces salieron la gente a defender los derechos de los criminales, porque tienen derechos sí, pero no más derechos que los demás, así que nosotros hicimos lo que teníamos que hacer, gracias a Dios”, manifestó.
El presidente salvadoreño reconoció que “fue impresionante el apoyo de toda la gente, y el apoyo de todas las instituciones. No había una institución en El Salvador que no estuviera de acuerdo en combatir el crimen de la manera que lo combatimos. No había un funcionario con poder en El Salvador que estuviera en contra de ese plan contra la delincuencia, ni siquiera los familiares, la mayoría de familiares de los pandilleros están de acuerdo con el plan”.
“Si nos aceptan un consejo de un país que no es como Costa Rica, quisiéramos ser como Costa Rica aún en muchas cosas, un país que pueda aprender mucho de Costa Rica, pero si nos aceptan un consejo en el tema de seguridad, tienen que ponerse todos detrás del plan o no va a funcionar”, concluyó.
