
San José, 10 jul (elmundo.cr) – Un total de 975 conductores fueron remitidos a la Fiscalía durante el primer semestre del presente año por conducir bajo los efectos del alcohol.
Según el Ministerio de Obras Públicas y Transportes, a hoy 15 personas han muerto en las calles de nuestro país por culpa de conductores que manejaban un vehículo influenciados por el alcohol, cifra 50% más alta que la reportada en el 2014.
“Esta cifra refleja claramente un comportamiento cada vez más temerario de muchos conductores que se animan a conducir su vehículo, pese a que saben que consumieron licor”, declaró el comisario Mario Calderón, director de la Policía de Tránsito.
El promedio diario de personas llevadas a los tribunales por ser detectadas conduciendo con alcohol en su sangre es de cinco, según el MOPT en un comunicado emitido este viernes.
“Lastimosamente, si bien esta cifra representa el 10% del total de pruebas aplicadas (9.359) es claro que son muchísimos más los conductores que no son sorprendidos por oficiales de Tránsito cuando manejan el vehículo en estado de ebriedad”, agrega el comunicado.
Para Calderón, estos 975 casos son precisamente, al menos, 975 vidas que potencialmente se salvaron, sin contar las víctimas inocentes que estos individuos pudieron involucrar en un accidente producto de su irresponsabilidad.
A este viernes se registran además 163 personas multadas con ¢306.448.70, tras ser sorprendidos conduciendo bajo los efectos del alcohol, pero sin alcanzar un nivel de conducta penal, que los habría enviado a los Tribunales de Justicia.
BORRACHOS SE ENOJAN
Como si no fuera suficiente el hecho de que conduzcan bajo los efectos del alcohol, el comisario Calderón detalló que quienes han sido detenidos bajo ese estado son personas con conductas agresivas, insultan e intentan golpear a los inspectores.
“Se enojan porque los detuvimos, visualizando solo la sanción económica o penal, sin darse cuenta que esos oficiales posiblemente les salvaron la vida o los libró de un cargo de conciencia para toda la vida, si hubiesen llegado a matar o herir a otra persona”, dijo el director de la Policía de Tránsito.
Pese al incremento en el número de personas que conducen borrachas, la Policía de Tránsito no tiene los equipos suficientes para aplicar alcoholemias a los conductores en todo el país.
Según el mismo MOPT, la Policía de Tránsito cuenta con solo 83 alcohosensores, con los cuales se efectúan 50 pruebas cada día.