San José, 23 ago (elmundo.cr) – Con el objetivo de fortalecer la capacidad de prevención y reducción de riesgos, y la preparación de medidas para atender las emergencias en sistemas de acueductos comunales (ASADAS), el Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA) y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), lanzaron oficialmente la Herramienta para la Gestión Integral de Riesgos en ASADAS (GIRA).
Este instrumento pretende facilitar la identificación, evaluación y administración frente a los riesgos de desastre en los sistemas de agua potable y saneamiento por parte de las y los gestores comunitarios del agua. Además de desarrollar los procedimientos para prevenir y mitigar estos riesgos, dar respuesta a las emergencias y recuperarse de los posibles impactos.
“La iniciativa surge de la necesidad de dotar a las ASADAS de capacidades para la gestión de los riesgos presentes y futuros en sus sistemas, funcionamiento y servicios que proveen a más de un millón de personas en Costa Rica, según lo establecido en el Programa de Mejoramiento de la Calidad del Agua en las ASADAS y la Política de Organización y Fortalecimiento de la Gestión Comunitaria de los Servicios de Agua Potable y Saneamiento del AyA”, indicó Yamileth Astorga, presidenta ejecutiva del AyA.
El territorio costarricense se encuentra expuesto a una gran cantidad de amenazas naturales asociadas a su ubicación, características climáticas y estructura geológica, por ejemplo, los escenarios de la crisis climática prevén una reducción de hasta un 35% de las precipitaciones en la región norte para los próximos treinta años.
Al mismo tiempo, se registra un aumento en la cantidad e intensidad de las precipitaciones, generando eventos como el huracán Otto, la tormenta Nate y otros más recientes que han causado grave destrucción en amplias zonas del país, incluyendo la infraestructura de los acueductos y por tanto vulnerabilizan el derecho humano al acceso a agua potable.
En este sentido, José Vicente Troya, Representante Residente del PNUD destacó que “este esfuerzo conjunto permite la generación de instrumentos novedosos que nos acercan al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible y la generación de resiliencia del país, al incorporar la gestión de riesgos de desastre en la planificación habitual de las comunidades”.
Mediante una serie de pasos sencillos en un único instrumento, las ASADAS podrán cumplir con varios requisitos equivalentes que solicitan diversas instituciones, tales como el Plan de emergencia de la Comisión Nacional de Prevención de Riesgos y Atención de Emergencias (CNE), el Plan de seguridad del agua requerido por el Ministerio de Salud, el Plan de gestión del riesgo que solicita la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (ARESEP) y el Sello Calidad del Agua del Laboratorio Nacional de Aguas (LNA).