“Nosotros pensamos como fuerza sindical que, si casos de este tipo se hubiesen presentado en profesionales de niveles medios en el Gobiernos Central o en otras instituciones, ya se hubiesen abierto procesos administrativos, procesos de despido y hasta suspensiones con goce de salario mientras se investigan”, comentó Vargas.
Otro punto evidente, según el sindicalista, es que esto golpea la imagen presidencial desde el punto de vista de la rigidez que el Partido Acción Ciudadana siempre planteó el tema de la ética.
“El Presidente Luis Guillermo Solís ha quedado debiendo desde el punto de vista de los funcionarios que están en la altísima cúpula del Poder Ejecutivo, porque considero que el proceder riguroso administrativo pudiese haber sido otro”, dijo Vargas.