San José, 28 nov (elmundo.cr) – Las lluvias casi permanentes que ha recibido el país desde el impacto del huracán Otto y más recientemente, por la influencia de un frente frío, reaparecieron las lagunas en el Volcán Irazú.
Según el geólogo Gino González Ilama, hoy pudieron hacer mediciones en el coloso, vecino del volcán Turrialba, y determinaron que en Playa Hermosa, una terraza aluvial que se ubica frente a ambos cráteres, se acumularon hasta 90.000 metros cúbicos de agua llovida, con una laguna que alcanzó los 1,2 metros de profundidad.
“Esto no representa que volcán esté más activo, es la interacción de un agente externo con el volcán. Sin embargo es claro que las lluvias han saturado bastante los suelos provocando deslizamientos”, dijo González.
Las mediciones térmicas del coloso arrojaron temperaturas máximas de 8,6 grados Celsius en esa laguna. El agua acumulada empezará a filtrarse y evaporarse con el tiempo.
Asimismo, detectaron algunos deslizamientos dentro del cráter activo del Volcán Irazú producto de las malas condiciones del tiempo de los últimos días.