San José, 20 nov (elmundo.cr) – La Comisión Nacional de Prevención de Riesgos y Atención de Emergencias (en su papel de ente rector del Sistema Nacional de Gestión del Riesgo lideró la coordinación de miles de acciones interinstitucionales para brindar atención a todas las personas afectadas por la emergencia.
Los rescates, operativos de movilización de personas, distribución de alimentos, apertura de albergues, entre otras acciones fueron coordinadas desde el Centro de Operaciones de Emergencia que se reúne todos los días con el fin de llevarle el pulso a la emergencia y planificar próximas acciones.
En los 20 días que lleva la emergencia de manera activa, se contabilizan un total de 2838 reportes por inundación, la mayoría ubicados en los cantones de Puntarenas, Carrillo y Santa Cruz en donde se reportaron múltiples comunidades anegadas, comercios afectados e infraestructura con algún tipo de daño.
En los albergues, a las 4:00 p.m. del 16 de noviembre se alcanzó la máxima ocupación con 3065 personas ubicadas en 50 sitios de alojamiento temporal. En estos sitios, no solo se brinda alimentación, resguardo y seguridad, sino que se fomentan las actividades lúdicas para la niñez y se toman en cuenta las necesidades de poblaciones como adultos mayores, personas con algún tipo de discapacidad, mujeres embarazadas, entre otras.
Cabe destacar que en estos sitios se da esperanza, pero también se recibe vida. En el albergue de Guayabo de Bagaces, dos mamás no imaginaban que en la estancia en este sitio nacerían sus dos bebés. Luego de nacidos, volvieron a los albergues en donde se les brindó un espacio adecuado y privado para que continúen con sus primeros días de vida.
Sobre insumos alimenticios entregados, se contabilizan más de 57.000 diarios de comida que sustentaron las necesidades de las familias de las zonas afectadas porque en una emergencia, aún con múltiples situaciones complicadas, es necesario alimentarse y por eso se habilitaron misiones a pie, a caballo, en helicóptero, en vehículo, entre otras.
Más de 50 instituciones y miles de funcionarios trabajando por solventar la emergencia se vieron apoyados de gran manera por los cientos de hermanas y hermanos salvadoreños que iniciaron labores humanitarias en dos puntos del país; Corredores y Guanacaste.
Las condiciones del tiempo mejoran, las lluvias y nivel del agua bajan y con esto, cientos de personas regresan a sus hogares. Desde el máximo de personas en albergues a hoy, 2103 personas ya volvieron a sus hogares con dos cosas seguras; raciones alimenticias y la convicción de que, en esta emergencia, nunca estuvieron solos.
Después de la atención a la emergencia, continúa el levantamiento de daños y pérdidas por parte de las instituciones con el fin de enlistar las principales afectaciones y solventarlas mediante procesos de recuperación y reconstrucción que fomenten el bienestar de las comunidades. Todo esto se realiza en el marco de la declaratoria de emergencia nacional.
